No nos hace falta presentar a Hennessey, uno de los preparadores más afamados del mundo, con creaciones de todo tipo, incluido el Venom GT, uno de los coches más rápidos del mundo. Pero hoy vamos a centrarnos en su último proyecto, que toma como base el Dodge Viper, un viejo conocido del especialista que ya pasó por su taller hace unos años.
Ahora Hennessey vuelve a sorprendernos con una bestia que declara 808 caballos de potencia en su versión básica. Sí, como has leído, ya que existe un nivel de preparación superior que eleva la potencia hasta los 1.120 caballos. ¿Cómo es posible? Mediante mejoras mecánicas basadas en la sobrealimentación.
El descomunal V10 ha sido llevado al límite para extraer semejante potencia. Además de un nuevo intercooler y la incorporación de un compresor que es capaz de soplar a 5 psi, Hennessey ha sustituido los inyectores de origen por otros de mayor caudal. Las modificaciones han requerido adaptar el conjunto de manguitos y modificar la gestión electrónica para asumir el aumento de potencia. De igual manera se ha optado por un nuevo sistema de escape que también ayuda en la optimización del rendimiento.
Las prestaciones, por supuesto, están a la altura del trabajo realizado. El Viper Venom 800 es capaz de acelerar de 0 a 100 kilómetros por hora en apenas 2,9 segundos. Pero esta cifra quizás no signifique tanto en su país de origen, Estados Unidos, donde la importancia está en la capacidad para recorrer el cuarto de milla. Y es que esta bestia solo necesita 10,5 segundos para recorrer esa distancia, si bien es cierto que para lograrlo necesita unos neumáticos de competición, puestos a disposición por el fabricante de forma opcional.
Para el siguiente escalón de potencia, denominado 1000 Twin Turbo, Hennessey solo ha necesitado aumentar el tamaño de los componentes modificados. Este nivel, que incluye un comprensor adicional, también requiere adaptar la bomba y el regulador de presión del combustible, de la misma forma que es necesaria una reprogramación de la ECU. El resultado son 1.120 caballos de potencia, que permiten al Viper pasar de 0 a 100 kilómetros por hora en 2,7 segundos y recorrer el cuarto de milla en 9,7 segundos.
Las mejoras se han limitado al apartado mecánico, por lo que el interior y el exterior permanecen de origen, a excepción de unos anagramas con las palabras “Hennessey” y “Venom” en la parte trasera del deportivo. El especialista ha confirmado que las modificaciones están disponibles para todos los Viper fabricados de 2013 a 2017, incluidas las variantes GTS y ACR. No sabemos si alguno de los afortunados dueños que se han hecho con una de las cinco ediciones finales del Viper se animará a incluir en su coche esta preparación, de ser así, tendrá que acudir a Hennessey para conocer más detalles sobre el precio, pues no ha sido desvelado de forma oficial.