Parece que la espera ha merecido la pena. El nuevo Astra GTC se postula como la opción más “juguetona” de la moderna gama Opel. Lo trasmite desde el primer vistazo, su carrocería tiene un aspecto musculoso asentado en el atlético estilo de su zaga y el gran tamaño de todas las opciones de ruedas disponibles con llantas de hasta nada menos que 20 pulgadas. Las suspensiones bajan 15 milímetros el chasis y contribuyen a dotar al coche de esa estética especialmente deportiva, con detalles como las manillas de las puertas y los retrovisores específicos o un pequeño spoiler trasero de serie en todas las versiones y rematado con muy buen gusto. Visto desde atrás, el techo baja en un ángulo atractivo al tiempo que el parachoques con un deportivo remate en forma de difusor de aire acaban de ofrecer las formas de un auténtico coche de altas prestaciones.
Sin embargo su interior no renuncia a ofrecer buenas cotas de habitabilidad. Las plazas delanteras son cómodas y amplias, y tras ellas hay un espacio muy bueno por altura libre incluso para pasajeros de talla alta, que tampoco tendrán inconvenientes en acomodar las piernas tras los asientos delanteros. Tres personas caben, aunque en detrimento del confort en anchura. No obstante la forma de las ventanillas traseras, enmarcadas por una carrocería en la que predomina la chapa, puede dar la sensación de estar en un espacio demasiado cerrado. Tras ellos hay un maletero con 380 litros de capacidad, muy buena cifra que lo sitúa en lo alto de la categoría.
Los acabados están en la línea de lo que nos tiene acostumbrados Opel en sus coches más modernos. Buenos materiales, diseños atractivos y actuales aunque si nos ponemos exigentes faltan algunos detalles como la calidad gráfica de las pantallas de información o del sistema de navegación para estar a la altura de sus rivales más sofisticados.
Suspensiones muy elaboradas
Uno de los aspectos en los que más hincapié ha hecho Opel a la hora de afinar el Astra GTC es sin duda la suspensión, para lograr un comportamiento dinámico a la altura. Si bien es de los pocos compactos que siguen confiando en el eje de torsión para el tren trasero, las posibles desviaciones de los brazos tirados se mitigan con un paralelogramo (o timonería) de Watt, un sistema de brazos anclados a un pivote central con rótulas empleado ya en los tiempos de los ejes rígidos. Lo más novedoso es el eje delantero, que cambia las columnas
MacPherson empleadas en el resto de la gama Astra por los muy especiales conjuntos del Insignia OPC denominados HiPerStrut, y que reducen el ángulo de convergencia en un 44 % y el de pivote de la dirección en un 46%, además de reducir notablemente el peso de los elementos que giran con la dirección gracias a unas manguetas montadas sobre cojinetes en las columnas, que a diferencia de lo que sucede en el resto de carrocerías Astra se mantienen fijas al girar el volante.
A esto se suman la comentada reducción de altura así como el incremento de un centímetro en la batalla, además de unas vías ampliadas cuatro y tres centímetros respectivamente en los ejes delantero (1.584 mm.) y trasero (1.588 mm.) para mejorar de forma apreciable la estabilidad del Astra en cualquier circunstancia.
En marcha se aprecia que el comportamiento es muy preciso y confiable a la hora de explorar los límites, resulta muy estable y se puede adecuar a las circunstancias de cada momento gracias al sistema FlexRide, que adapta constantemente la dureza de los amortiguadores con control electrónico así como el funcionamiento del control de estabilidad en función de la conducción. Además dispone de tres modos de funcionamiento seleccionables por el conductor: Estándar, Sport y Tour, que se traducen sobre la carretera en mayor o menor firmeza de forma claramente perceptible por el conductor… y por los pasajeros, ya que el modo Sport es claramente deportivo en detrimento del confort de suspensión, como debe ser.
La dirección de asistencia eléctrica está programada con una dureza variable en función de la velocidad y ofrece un tacto intachable en cualquier circunstancia, es precisa y firme en carretera pero también suave a la hora de aparcar o callejear.
Gama de nivel
El Astra GTC llega al mercado con una gama que se centra por el momento en tres motores de prestaciones notables, todos ellos con turbo. En gasolina puede elegirse entre el 1.4 Turbo de 140 caballos y el 1.6 Turbo de 180 cv y en Diesel la única opción es el poderoso 2.0 CDTi de 165 cv. Tuvimos ocasión de conducir el 1.6 Turbo y el 2.0 CDTi, y si tuviéramos que elegir… nos quedaríamos con el Diesel. Está más lleno en toda la gama de revoluciones, responde con más eficacia al acelerador y anuncia unos consumos realmente aquilatados. Tanto este como el 1.4 Turbo de gasolina -que no estaba disponible para este primer test- disponen de sistema
Stop/Start y pagan un impuesto de circulación del 4,75% por unas emisiones de CO2 de 127 y 139 gramos / kilómetro respectivamente (consumos combinados: 4,8 y 5,9 litros / 100 kilómetros respectivamente), frente al 9,75% que graba al 1.6 Turbo que emite 168 gr/km (consumo combinado: 7,2 l/100km).
Las prestaciones garantizan en los tres casos un buen nivel de diversión al volante. El 1.4 Turbo acelera de 0 a 100 kilómetros / hora en 9,9 segundos y alcanza una punta de 201 km/h, el 1.6 Turbo alcanza los 220 km/h y acelera en 8,3 segundos mientras que el 2.0 CDTi registra 210 km/h y 8,9 segundos.
Se ofrece en dos acabados: Selective y Sportive; este último más equipado de serie con llantas de 18 pulgadas, climatizador bizona, apoyabrazos central, volante de cuero perforado e iluminación de ambiente en las puertas. Puede disponer de elementos opcionales de última generación integrados en paquetes de equipamiento, como el Opel Eye, una cámara frontal integrada tras el retrovisor interior que es capaz de leer las señales, indicar la distancia de seguridad con respecto al coche precedente y avisar sonoramente en caso de peligro de colisión, cambiar automáticamente de cortas a largas o avisar de cambios involuntarios de carril. También hay otras opciones para personalizar el coche: llantas, parabrisas panorámico o el“kit” OPC, para dotar de más deportividad el GTC, adoptando elementos estéticos interiores y exteriores de la futura versión de 280 caballos (ver reportaje) que llegará a mediados de 2012.
También a mediados del año próximo llegará otra versión Diesel, 1.7 CDTi con 125 caballos, para hacer más accesible el Opel Astra GTC con este combustible.
Precios Opel Astra GTC
Opel Astra GTC 1.4 Turbo Selective 22.380 euros
Opel Astra GTC 1.6 Turbo Selective 24.200 €
Opel Astra GTC 2.0 CDTi Selective 23.885 €
Opel Astra GTC 1.4 Turbo Sportive 23.980 €
Opel Astra GTC 1.6 Turbo Sportive 25.800 €
Opel Astra GTC 2.0 CDTi Sportive 25.485 €
