Fornasari ha sido una marca que siempre se ha caracterizado por productos diferentes al resto, con carrocerías todoterreno y potentes motores V8 heredados del Chevrolet Corvette. A su radical aspecto se unía un lujoso acabado personalizado y gusto por el detalle italianos.
En su último modelo en llegar a nuestro país, Fornasari va un paso más allá y pone a disposición de sus acaudalados clientes una máquina que poco tiene que ver con el resto de la gama. Como si de un prototipo del Dakar se tratara, el Racing Buggy es un monstruo que no teme a ningún obstáculo o terreno.
Las formas rectilíneas y cortantes no serán del agrado de todos, pero no hay que negar que pese a su reducida longitud –sólo 4,33 metros- su estética es masiva y contundente. Si el cliente así lo desea, la carrocería puede estar fabricada en ligero carbono y las llantas ser de hasta 23 pulgadas.
Por primera vez en un vehículo Fornasari y en función del motor elegido, el Racing Buggy dispondrá de un chasis basado en Chevrolet TrailBlazer–fruto del acuerdo entre la marca italiana y General Motors, que le suministra además los motores- o uno de fabricación tubular, técnica empleada en el resto de la gama.
Para la primera opción, el cliente del Racing Buggy podrá optar entre un 2.8 turbodiésel de 180 caballos o un gasolina 4.2 de 250. Reservados para el chasis tubular quedan los potentes V8 del Corvette, que entregarán de 500 a 750 caballos en función de su alimentación así como un turbodiésel V6 de 250 caballos. Fornasari afirma que con el ocho cilindros más potente puede alcanzar los 300 km/h y alcanzar los 100 en sólo 3,9 segundos.
Gran parte del comportamiento y las aptitudes offroad del Racing Buggy vienen dadas por sus suspensiones y sistema de tracción integral. Las primeras cuentan con un esquema de cuatro triángulos dobles en las cuatro ruedas mientras que el diferencial viscoso central y el trasero con autoblocante garantizan una buena tracción en cualquier condición. El peso final de conjunto rondará los 1.700 kilos en función de la motorización y equipamiento elegido.
La poderosa imagen exterior más propia de un vehículo de competición y su espíritu recreacional contrastan con un habitáculo capaz de albergar a cuatro ocupantes y 400 litros de carga en su maletero y sobre todo por un lujo y acabados de alto nivel. Según la marca, cualquier material o revestimiento en cualquier tonalidad puede ser utilizado para revestir el interior.
El Fornasari Racing Buggy ya está a la venta en nuestro país desde un precio que partirá de los 98.655 euros y hasta los más de 286.000 que costará la versión tope.Te dejamos un vídeo en el que podrás ver al Fornasari más radical jamás creado.
