Su dilatada experiencia en el mundo de la competición avala a Honda como especialista en motores de gasolina y lo mismo le sucede a Renault con sus populares dCi de gasóleo, que han terminado equipando hasta los Mercedes de última factura. Sin embargo ambas marcas han decidido emprender nuevos caminos, los nipones tras comprobar que las ventas del Civic en Europa se concentraban en sus versiones Diesel y los franceses advertidos por su gobierno, que ha anunciado medidas contra los gases contaminantes de éstos.

Fiel a su estilo, Renault decidió renovar su gama de motores gasolina reemplazando el veterano bloque 1.6 atmosférico por otro cuatro cilindros ya existente, el 1.2 que gracias a la tecnología TCe –turbo e inyección directa–, logra un rendimiento notablemente más satisfactorio a cualquier régimen y homologa un consumo inferior. Honda se ha sumado también a esta tendencia de motores pequeños, conocida en el argot como downsizing, y ha completado la gama del Civic con un bloque de sólo 1.6 litros, bastante más compacto y eficiente que el 2.2 i-DTEC que, aunque resiste en la oferta, se presenta ya como una opción más potente y menos demandada.

ESPÍRITU DE LUCHA

El reto de ambas mecánicas pasaba por hacer olvidar a sus antecesoras y lo cierto es que lo han logrado con nota. Especialmente el 1.2 TCe, tan agradable y silencioso como su antecesor pero mucho más aprovechable a medio y bajo régimen. Sus 115 caballos dan mucho de sí y aunque el cambio manual de seis marchas no presenta un manejo tan preciso como el del Civic –de idénticas características–, con un poco de pericia logramos ir rápido en carretera de montaña. Además, conduciendo de forma relajada en nuestro trayecto diario, restringimos el gasto a 5,5 litros/100 kilómetros, un valor igualmente positivo.

La ruta con el Mégane nos dejó un buen sabor de boca pero al cambio de volante no tardamos en apreciar las ventajas del nuevo Diesel de Honda, que resulta especialmente fino y silencioso pero que también destaca por una gran entrega de par desde abajo. El Civic se manifiesta un punto más incisivo en las zonas de curvas y no sólo por su mecánica –120 CV–, el bastidor también se siente más estable, la dirección es más comunicativa y el cambio, como apuntábamos, bastante más preciso. Para colmo, en nuestro recorrido de consumos, el ordenador de abordo arrojó una cifra incontestable: 4,5 litros a los 100 kilómetros.

El Civic es más eficiente y ofrece un comportamiento dinámico superior pero a cambio, el Mégane resulta más práctico y asequible. La dotación de serie es algo mayor en el francés y el catálogo de opciones es amplio, por el contrario, el Civic presenta una gama más cerrada que nos obliga a subir el nivel de acabado si queremos disponer de un equipo multimedia con conexión para el teléfono o navegador. Eso sí, quizá sea la mejor inversión a medio plazo, tal y como marcan las cifras.

CONCLUSIÓN

El Civic consume menos cantidad de un combustible más barato y aunque su seguro es más caro que el del Mégane, una reventa presumiblemente superior nos permitirá amortizarlo mejor después de cinco años y tras 50.000 kilómetros recorridos. No hay duda, el reciente propulsor 1.6 de Honda ofrece una relación insuperable entre prestaciones y consumo y no sólo sobre el papel es recomendable, combina su eficiencia con una gran suavidad de funcionamiento y, aunque el 1.2 TCe de Renault mejora notablemente las cifras del anterior 1.6 atmosférico, no responde tan bien a bajo y medio régimen como el i-DTEC, uno de los mejores Diesel del momento.

Renault Mégane TCe: 17.000 euros
Precio combustible (50.000 kms.): 1,40 euros/litro; 3.710 euros
Precio del seguro (5 años): 1.800 euros
Reventa (5 años, aprox.): 7.500 euros
Coste final: 14.470 euros

Honda Civic 1.6 i-DTEC: 17.800 euros
Precio combustible (50.000 kms.): 1,32 euros/litro; 2.376 euros
Precio del seguro (5 años): 2.500 euros
Reventa (5 años, aprox.): 10.000 euros
Coste final: 12.676 euros

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Jose Carlos Luque

Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.