Sólo 66 afortunados en todo el mundo tendrán la oportunidad de conducir este exclusivo modelo que a buen seguro se revalorizará pasado el tiempo. Creado sobre el XK acabado Portfolio, tanto el cupé como el cabrio estarán disponibles con el propulsor V8 de cinco litros y 380 caballos (5,5 segundos y 5,6 segundos respectivamente en el 0 a 100 kilómetros/hora).

Al margen de los logos XK66 con la bandera británica que hay repartidos por la carrocería y por el habitáculo, se personaliza con espejos retrovisores cromados, llantas pulidas de 20 pulgadas Orona, techo en color beige o negro (en el caso del cabrio). Además, tiene faros bixenón adaptativos, cámara de marcha atrás, testigo de presión de neumáticos, levas del cambio en aluminio, cuero, madera en el salpicadero... El cliente lo único que puede elegir es el color para la carrocería: verde British Racing Green o gris Stratus.

Se ha elegido el 66 porque son los años que lleva produciéndose la saga XK

¿Y de cuántos euros estamos hablando? Por estas lujosas variantes hay que desembolsar 99.380 euros en el caso del cupé y 107.580 euros si se trata del Cabrio. ¿Mucho? ¿Poco? En nuestro país los XK Coupé y Cabrio 'básicos' están a la venta desde 106.350 euros y 115.810 euros, aunque a nosotros nos debe dar igual porque los XK66 sólo llegarán a Alemania y éstos son sus precios allí.