Nacido en el 2009, el Lexus LFA se convertía en uno de los deportivos más prestacionales que había fabricado la marca japonesa en toda su trayectoria. Tras construir 500 ejemplares, decidieron cesar su producción y dejar así un hueco en su gama de modelos que aún sigue sin cubrirse, aunque todo apunta que será el LC F que te mostramos hace unos meses su sustituto.
Sin embargo, las recientes imágenes que nos han proporcionado nuestros espías desde el Infierno Verde nos han hecho que pensar, y mucho. Decimos esto porque la marca de lujo de Toyota se ha presentado en el famoso trazado alemán con un par de mulas de pruebas camufladas del mítico supercar de motor V10 atmosférico, surgiéndonos una serie de incógnitas al respecto.
Si nos fijamos en las fotografías veremos al LFA luciendo un camuflaje en las aletas delanteras y traseras, más ensanchadas que en el modelo ‘normal’. Además, el paragolpes trasero de color blanco indica que también se han realizado modificaciones en esa zona. Por otra parte, los elementos aerodinámicos que luce en la parte delantera y el gran alerón que preside su zaga nos hacen pensar que el modelo tomado como base es la edición Nürburgring.
Pero dados los planes de Lexus de no fabricar un sustituto directo del famoso supercar, quizás surja la posibilidad de que sean los responsables de Toyota quienes estén trabajando en un futuro deportivo de altas prestaciones firmado por el equipo Gazoo Racing. Tal vez, los ingenieros japoneses estén evaluando la tecnología de suspensión o frenado para el futuro modelo, tomando como base una contrastada como la del LFA.
No obstante, debido al revuelo ocasionado por la presencia de estas mulas de pruebas, nuestros espías nos han asegurado que no se trata de ningún prototipo que anticipe el desarrollo de un nuevo modelo desarrollado por el fabricante japonés. En su lugar, Lexus está haciendo uso de estos ejemplares para probar nuevos neumáticos de competición, poniendo a los mandos a un piloto profesional de la marca, y realizando distintas configuraciones de llantas y neumáticos.
Como decimos, un nuevo LFA no está en la mente de los directivos nipones, además de que este, en el hipotético caso de recibir el visto bueno, no se basaría en el chasis y la mecánica de un modelo de hace diez años. De cualquier forma, estaremos atentos por si surgen novedades al respecto. Quién sabe si próximamente el que nos sorprende con un ejemplar a la altura de este sea Toyota.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
