La base del Fabia de competición ha servido a los diseñadores e ingenieros de Skoda para desarrollar un RS totalmente descapotado, creado de forma exclusiva para el Wörthersee de este año. Así, toda la parte mecánica queda inalterada y se mantiene como un tracción total capaz de digerir los 280 caballos procedentes de su motor de dos litros con turbo. El resto de elementos estéticos y de la carrocería no varían de la versión del Intercontinental Rally Challenge en el que participa el Fabia RS 2000 y hace de las suyas: llantas multirradio pintadas en blanco, cinco puertas, espejos retrovisores específicos, tomas de aireación y un prominente difusor trasero.
Este RS 2000 roadster (no tiene posibilidad de montar techo, ni de lona ni metálico) añade un pequeño spoiler situado en la parte superior del pequeño portón del maletero y presenta cuatro plazas reales en su habitáculo. Además, las ventanillas presentan un corte específico de cintura descendente desde delante hacia detrás. Por lo demás, desconocemos si se ha realizado un refuerzo del chasis para aumentar la rigidez torsional.
