Desde hace poco menos de un año, el Octavia RS (conocido en otros mercados como VRS) nos ha seducido por aunar, en un mismo concepto, familiaridad y deportividad: unas plazas traseras espaciosas, un maletero de 590 litros y una puesta a punto específica dan como resultado uno de los coches más interesantes de estos momentos, además, por poco más de 30.000 euros. Ahora, los papás y las mamás más racing tienen un argumento nuevo para decantarse por este Skoda si todo lo anterior no les convence: más potencia.
Sí, porque en el marco del Salón de Ginebra, donde la firma presenta el Superb y el Fabia Monte Carlo, el Octavia RS recibe un 'chute' de energía en su 2.0 TSI para alcanzar 230 caballos. Con semejante 'corazón', esta berlina acelera de 0 a 100 en 6,7 segundos y alcanza una velocidad máxima de 250 kilómetros/hora, es decir, 0,1 segundos menos y 2 kilómetros/hora más que el RS de 220 caballos.
La fórmula que emplea Skoda no es nueva dentro del grupo alemán al que pertenece, puesto que es la misma que utiliza Volkswagen en su Golf GTI, ya que el 'normal' vale 31.990 euros y lleva idéntico 2.0 TSI con 220 caballos, si bien por 1.740 caballos, la potencia sube a 230 caballos y se añade, entre otros detalles que justifican el incremento de precio, llantas de 18 pulgadas y diferencial delantero autoblocante controlado electrónicamente.