Tesla ha presentado recientemente el último prototipo de lo que se convertirá en un futuro cercano, en el primer crossover del catálogo de la marca. Tesla que tiene como denominador común la utilización de la energía eléctrica como único método de propulsión de sus vehículos, ha mostrado al mundo su nuevo proyecto, el Tesla Model X. Se convertiría así en el tercer modelo junto al deportivo eléctrico Roadster y la berlina Model S.
Es precisamente de esta última de donde toma la inspiración el SUV, aunque aumenta sus dimensiones para poder acoger una tercera fila de asientos. El acceso a ella no es nada complicado gracias a unas puertas de ‘alas de gaviota’ tipo Mercedes SLS, que además se convertirán en un espectáculo cada vez que queramos abandonar o entrar en el habitáculo. La marca a puesto su punto de mira en el Audi Q7 y afirma que el Model X ofrecerá un espacio interior mayor que el de los cuatro aros, al que se suma la última tecnología que permitirá por ejemplo encontrar los puntos de carga más cercanos.
Tracción integral o propulsión
Y es que el Tesla Model X, al igual que sus hermanos, estará propulsado por electricidad. Podremos optar por tres variantes: una con un solo motor ubicado en el eje trasero, una segunda con tracción integral y dos motores –uno en cada eje- y una tercera aún más deportiva que deriva de la anterior y que bajará de los 5 segundos en el 0 a 100 km/h. La autonomía dependerá del tipo de baterías de litio que decidamos equipar -65 kWh o 80 kWh- aunque será un 10% inferior a la del Model S.
Los precios para Estados Unidos partirán de unos 50.000 dólares para la versión básica hasta los 90.000 de la versión más potente y equipada. Su llegada a los concesionarios se producirá en 2014.
