La Guardia Civil ha llegado a cabo 6.548 inspecciones a talleres durante el año pasado, en un plan intensivo de control para verificar el buen funcionamiento del sector ante las crecientes denuncias recibidas desde las Anfac –asociación de fabricantes de automóviles y camiones– y Ganvam –asociación de vendedores de vehículos a motor–.

En las más de 6.500 inspecciones efectuadas se detectaron 17.070 infracciones administrativas, que fueron remitidos a los órganos competentes de las respectivas comunidades autónomas.

De éstas, el 61% hacen referencia a delitos medioambientales, el 28% a carecer de las licencias adecuadas y el 10,4% a incumplimiento con la Seguridad Social.

El global del fraude desmantelado se cifra en torno a los 3.500 millones de euros año. La operación ha acabado con 259 detenciones

Tras la correspondiente tramitación de expedientes un total de 238 talleres han tenido que cesar en su actividad.La Guardia Civil ha pasado de realizar sólo 61 inspecciones en 2011 a las citadas 6.548 en 2014.

Es importante saber que el sector de la reparación de vehículos ha perdido un 30% de facturación en los últimos seis años, lo que se traduce en un descenso de más de 12 millones de reparaciones con una reducción de ingresos de 3.500 millones de euros; un dato que ha encendido la luz de alarma.

Este tipo de actividades citas suponen un grave perjuicio para el sector de las reparaciones y el mantenimiento en general, pues por un lado ponen en peligro la seguridad vial de todos, mientras que por otro destruye puestos de trabajo en los talleres y centros de mantenimiento autorizados.