Sin duda Nissan ha conseguido un suculento contrato. La flota de taxis de Nueva York es la mayor de Estados Unidos, con más de 13.000 coches en circulación, y sus responsables han elegido el NV200 como modelo exclusivo para sustituir a los humeantes, enormes y antieficientes sedanes de Detroit. Es un signo de los tiempos que corren y sin duda se trata de una decisión que será aplaudida por los ciudadanos concienciados con el medio ambiente en la Gran Manzana, aunque a costa de terminar con una imagen que ya formaba parte de la ciudad para sus visitantes.

De todas formas las ventajas prácticas serán incuestionables y este nuevo modelo modernizará y mejorará la calidad del servicio prestado por los Yellow Cab. En la elección del Nissan NV200, fabricado en Cuernavaca (Mexico), ha pesado el bajo consumo y reducidas emisiones de su motor de cuatro cilindros y dos litros de cilindrada, así como la mejora en comodidad para cuatro ocupantes y su equipaje. Además, durante 2012 seis taxistas neoyorquinos pondrán a prueba otras tantas unidades del Nissan Leaf, para comprobar el funcionamiento de un vehículo completamente eléctrico en el uso habitual de un taxi, lo que será una valiosa experiencia de cara al futuro desarrollo de propuestas "cero emisiones" para el sector.

Los futuros taxis de Nueva York están pensados y diseñados con ideas muy interesantes que otras ciudades seguramente acabarán aplicando a estos vehículos de servicio público:
- Techo panorámico para poder admirar el “skyline” de la ciudad que nunca duerme.

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- Conexiones USB y tomas para la recarga de dispositivos electrónicos.
- Control independiente del aire acondicionado en la zona de los pasajeros.
- Claxon de bajo volumen apoyado por señales luminosas para reducir el impacto de la contaminación acústica.
- Puertas traseras de apertura corredera para evitar riesgo de colisión con ciclistas, motoristas u otros automóviles, que además se abrirán acompañadas de indicaciones luminosas.


600.000 usuarios al día pondrán a prueba el nuevo taxi de Nueva York a partir de 2013, con una concesión exclusiva que asegura a Nissan el contrato durante 10 años a un coste unitario de 29.000 dólares. Seguro que son más cómodos y funcionales... pero en el cambio el cine ha perdido un excelente actor secundario.