Nunca es fácil batir un récord en el mundo del automovilismo, pero cuando la prueba consiste en ser el más rápido en acelerar desde parado hasta alcanzar los 400 kilómetros/hora para detenerse después también en el menor tiempo posible, entenderán que hay muy pocos automóviles en el mundo capaces de hacerlo y que por supuesto, se necesita también un espacio adecuado y un piloto a la altura de las circunstancias.

Bien, pues Bugatti encontró lo primero en casa y es que su último Chiron armado con el motor W16 de 8.0 litros y 1.500 caballos se nos antoja como uno de los pocos deportivos capacitados para lograr semejante proeza. Sin embargo, para lo segundo decidió fichar al piloto de la Indycar Juan Pablo Montoya, todo un ex Fórmula 1 que continúa pilotando a velocidades de vértigo.

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Ataviado con el dorsal 42 en su parrilla frontal, el Bugatti Chiron de Montoya marcó un tiempo de 41,96 segundos en el 0-400-0 tras recorrer 3,1 kilómetros, una marca sencillamente espectacular.

El propio Montoya aseguró que con el Chiron había sido “todo demasiado fácil. Simplemente te subes y conduces”; pero aquí está el vídeo que lo demuestra, en la drástica frenada final el volante apenas se mueve. Bravo por Bugatti.

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Jose Carlos Luque

Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.