El pasado día 9 de este mes tenía lugar en Estados Unidos la presentación de la versión más potente de la berlina media de BMW, el M5, y para ello en los días previos pudimos ver como la marca bávara presentaba un vídeo en el que aparecían la anterior y la nueva generación realizando unos ejercicios de drif alrededor de un circuito.

En las imágenes podíamos ver como ambos modelos iban en paralelo realizando una serie de derrapes constantes a lo largo de todo el recorrido, mojado por agua, durante un largo periodo de tiempo. Días más tarde nos enteramos de que ese documento de presentación le sirvió a BMW para conseguir dos Guinness World Records.

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Por un lado ha conseguido el récord del derrape más largo del mundo, título que ostentaba el Toyota GT 86 con 5 horas y 46 minutos seguidas derrapando, al derrapar durante 8 horas en las que recorrió un total de 232.5 millas (374 kilómetros). Por otro, el récord mundial del derrape más largo producido por dos vehículos (con ayuda del agua) con una distancia de 39.25 millas (63 kilómetros). Los responsables de estos títulos han sido Johan Schwartz en el F90, y Matt Mullins y Matt Butts en el F10.

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Sin embargo, el propulsor V8 de 4.4 litros del M5 (F90) con sus 600 caballos no podía estar 8 horas seguidas sin repostar y para ello tuvieron que diseñar un sofisticado sistema de repostaje en ambos vehículos que permitiera realizar una maniobra segura y rápida en movimiento. En este vídeo ofrecido por BMW USA veréis como consiguieron efectuar el repostaje de forma correcta y todo el proceso que se esconde detrás.

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Borja Díaz

Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta