¿Es el Aston Martin Vulcan, un coche nacido solo para circuitos, un vehículo adecuado para viajar por Europa? Alguien ha pensado que sí y además los ha convertido en esto: un modificado superdeportivo con los ajustes necesarios para homologarlo para la carretera y decorado con el camuflaje de un bombardero británico. ¿Por que? Para competir en la famosa Gumball 3000.
Bautizado como Aston Martin 'Vulcan Bomber' recibe este nombre por el Avro Vulcan, un avión bombardero de la Royal Air Force británica que prestó servicio entre finales de los 50 y mediados de los 80.
Quizás lo más llamativo de esta conversión sea su frontal, que ha recibido unos nuevos faros que acompañan a las finas ópticas ya existentes, y que de hecho son sorprendentemente parecidos a los del futuro Aston Martin Vanquish. De hecho encajan tan bien con el resto del diseño del Vulcan que parece como si los llevara de forma oficial.
En esta preparación para la calle obra de RML Group, cuyo proceso ya vimos hace un par de años, se incluyen otras novedades como limpiaparabrisas más convencionales, un splitter delantero más elevado para salvar las irregularidades del asfalto público, intermitentes en el alerón trasero, reflectantes y una altura de la carrocería respecto al suelo que crece en 30 mm.
Por su parte el interior recibe ciertos ajustes para mejorar la comodidad al volante con asientos algo más aptos para viajes largos como este. Incluso su motor, que sigue siendo un V12 de 7.0 litros recibe algunas modificaciones para cumplir con la normativa de emisiones, incluyendo un nuevo embrague, relaciones de cambio revisadas para adaptarlo a su funcionamiento en carretera, una suspensión más suave y un nuevo escape que no evita que este Vulcan siga teniendo un sonido salvaje.
Con esta carta de presentacion hasta la propia Aston Martin nos ha ofrecido un primer vistazo al modelo antes de su participación en la Gumball 3000, que llevará a los participantes desde Mikonos, en Grecia, hasta Ibiza, en España.
Especializado en el mundo del motor, la competición y la tecnología, Antonio Ramos Ochoa es redactor de Car and Driver. Se comenta que antes de bajarse del carro ya iba diciendo el nombre de los coches que iba viendo por la calle. Unos cuantos años después sigue hablando de una de sus pasiones aquí. Aficionado al Motorsport, el cine, videojuegos y la historia, incluso se desfoga de vez en cuando al volante de un kart o un simulador.
