Los sistemas de audio para el automóvil dan un paso adelante con la nueva tecnología presentada por Audi. Se trata del sonido 3D, un sistema que permite a los pasajeros del vehículo experimentar la altura espacial y disfrutar de la música de forma tridimensional. Su llegada a los vehículos de producción se producirá en 2015, haciendo su debut en el nuevo Audi Q7.

Desarrollada en colaboración con el Instituto Fraunhofer de Circuitos Integrados en Erlanguen, esta tecnología se ofrecerá como un componente del sistema Advanced Sound System de Bang & Olufsen y del Bose Surround Sound. El sonido 3D funciona a través de un complejo algoritmo que calcula las señales de control para cada altavoz con rapidez y precisión.

En el sistema Bang & Olufsen el procesador digital activa 11 canales con un total de 23 altavoces, de forma que el sonido es igual de preciso y armonioso en cada asiento. Cuatro altavoces instalados en los montantes A, cada uno de ellos con sus propios canales de difusión, transmiten la parte correspondiente de sonido que genera la altura espacial. Los altavoces de nuevo desarrollo, como un subwoofer de mayores dimensiones y un nuevo amplificador –que eleva su potencia hasta los 1.920 vatios–, terminan de garantizar una experiencia acústica del más alto nivel. Por otra parte, el sistema de sonido Bose Surround System genera el sonido envolvente con 20 altavoces, también con cuatro de ellos situados más arriba para generar la tercera dimensión.

Con el sistema de sonido 3D, Audi mantiene su apuesta por abrir nuevos caminos en el sector de la alta fidelidad. En 2005 introdujo el sonido de alta gama en el Audi A8, también de la mano de Bang & Olufsen. El especialista danés lo llevó unos años después al sector de los compactos, implantándolo en la tercera generación del Audi A3. El nuevo Audi TT dio un paso importante hacia el audio 3D este año con la adopción de la tecnología Symphoria, un software para el tratamiento y reproducción de señales de audio desarrollado también con el Instituto Fraunhofer.