Es el hypercar por excelencia y pocos pueden hacerle frente. Si los 2,4 millones de euros que cuesta cada unidad y sus 1.500 caballos no te parecen suficientes aquí va otro argumento más a su favor: Un servicio de telemetría que permite que el conductor esté plenamente informado de todo los relacionado con la conducción. Desde corregir la presión de un neumático o cual es el régimen de giro del motor más adecuado en cada momento y toda esta información llega directamente desde la central de la marca en Molsheim, Francia.
Estos datos incluso se pueden transmitir en tiempo real, un servicio hasta ahora solo disponible en vehículos de carreras como Fórmula 1 o DTM.
Con este sistema de telemetría se proporciona a los propietarios asistencia en todos los asuntos técnicos relacionados con su Bugatti. A cualquier hora del día o incluso de la noche.
Este servicio no es algo nuevo dado que desde 2004 Bugatti ha estado en condiciones de monitorizar el estado técnico de cada Bugatti, si bien esta marca es el primer fabricante de automóviles en aplicar la telemetría en un vehículo de producción.
Este sistema monitoriza constantemente el funcionamiento siempre que el Chiron esté ubicado en una zona con cobertura móvil. Es capaz de monitorizar 10.000 señales de todas las partes del automóvil, incluyendo el propio motor, transmisión, luces, climatización, sistema de información y entretenimiento. Estos datos se transfieren en tiempo real, algo que normalmente solo está disponible en coches de Fórmula 1 o DTM, donde los mecánicos del equipo de carreras pueden controlar sus coches desde boxes.
El servicio de telemetría está disponible en Europa/Rusia, Medio Oriente y Asia Pacífico y Norteamérica. Todos ellos son apoyados por mecánicos de la sede de la marca en Molsheim y por los 34 concesionarios de la marca.
Este servicio de telemetria también puede transmitir datos desde la sede hacia el vehículo por ejemplo para llevar a cabo actualizaciones del software.
Todas estas instrucciones se gestionan a través de un ordenador central que incluye el Bugatti Chiron. Una caja de aluminio de sólo 140 milímetros de ancho por 50 de alto y 100 de largo.
Este sistema de telemetría también es muy útil en caso de robo ya que es capaz incluso de controlar si el vehículo ha sido robado y por ejemplo interpreta si el vehículo ha sido transportado en un camión.
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