El Chrysler PT Cruiser es uno de esos coches incomprendidos que aterrizaron a comienzos de siglo estrenando la fiebre neo-retro que siguieron otros modelos. Sin embargo algunos fueron recibidos mejor que otros y este ejemplar que pretendía imitar a los coches de la primera mitad del siglo XX no acabó siendo para muchos un coche poco agraciado.
Claro que si conviertes a este particular monovolumen americano en una bestia con más de 800 CV su estética ya te importa menos, mucho menos. Estas publicaciones en redes nos dejan ver una preparación que va más allá de una simple potenciación del motor 2.4 de cuatro cilindros que aquí recibe un turbocompresor Garrett GT35R, mejoras en el combustible para funcionar con E85, nuevos inyectores de 2.000 cc y bombas de combustible mejoradas que otorgan un total de 820 CV y 951 Nm de par.
Además de todo eso cuenta con neumáticos slicks Hossier para drag races y en el frontal con un pequeño alerón para mejoras su aerodinámica. También vemos interior reacondicionado y aligerado con asientos baquet y jaula de seguridad.
En una fase previa ya era capaz de marcar una velocidad de 267 km/h en la media milla y con todas estas novedades este PT Cruiser negro debería superar fácilmente esa marca debería ir aún más allá de los 273 km/h. Y aún parece que queda mucho por hacer por lo que podríamos acabar viendo algo que hará cambiar nuestra idea de un PT Cruiser para siempre.
Especializado en el mundo del motor, la competición y la tecnología, Antonio Ramos Ochoa es redactor de Car and Driver. Se comenta que antes de bajarse del carro ya iba diciendo el nombre de los coches que iba viendo por la calle. Unos cuantos años después sigue hablando de una de sus pasiones aquí. Aficionado al Motorsport, el cine, videojuegos y la historia, incluso se desfoga de vez en cuando al volante de un kart o un simulador.
