Incluso en un vehículo como el Citroën C5 Aircross, dar cabida a todos los bultos con los que viajamos habitualmente, nunca es tarea fácil. Hablamos de un SUV con 466 litros litros de maletero, pero este volumen puede incrementarse gracias a la modularidad y aprovecharse de una forma bien distinta si sabemos organizar la carga adecuadamente.
Gracias a unos raíles longitudinales colocados en el piso del coche, los asientos traseros se pueden deslizar 150 milímetros hacia adelante y así conseguir, por ejemplo, 580 litros de volumen total conservando las cinco plazas. Pero esto no es todo, retirando la cubierta que separa el doble fondo, se puede aumentar a 720, espacio más que suficiente para que Vanesa Travieso, discípula de Marie Kondo y experta en optimización de espacio, trabaje con todos los elementos a su disposición.
El reto que afronta Vanesa parece parece imposible: dos maletas grandes, numerosos juguetes, la silla de bebé, la jaula de la mascota... Pero con algunos consejos, logra meterlo todo. Hay que empezar cambiando la mentalidad horizontal a vertical desde el primer paso: hacer la maleta. Esto se puede extrapolar al maletero del coche, las maletas, los bultos grandes en vertical en vez de horizontal, y también aprovechar los espacios pequeños para meter cosas y encajarlas.
En el C5 Aircross se pueden obtener hasta 81 combinaciones de reparto de maletero en función de cómo repartimos el espacio. Por ejemplo, haciendo uso o no del doble fondo, abatiendo algún o todos los asientos traseros, etc. En este caso, al plegar los asientos traseros se puede conseguir doblar la capacidad o incluso más, de 720 litros a 1.630, un espacio perfecto para transportar objetos muy voluminosos o ser tú mismo el que haga la mudanza de la casa y quede terminada en unos pocos viajes.
Con la norma 'Serva Ordinem et ordo servabit te' o guarda el orden y el orden te guardará, Vanesa Travieso, aplica sus conocimientos en el C5 Aircross y da unos tips muy prácticos para que los llevemos a cabo ahora que se acerca la Semana Santa.
