Cuando uno se acerca a la mayoría de edad son muchos los planes que se nos pasan por la cabeza y entre todos ellos destaca uno por encima del resto, sacarse el carné de conducir. Ya no tendrás la obligación de utilizar el transporte público ni recurrir a tus padres, la libertad acaba de comenzar.

Sin embargo, casi todo en esta vida requiere de cierta responsabilidad, y más si acabas de ponerte a los mandos de un vehículo por primera vez. Decimos todo esto debido al reciente suceso que ha ocurrido en la ciudad de Hemer, Alemania, donde un joven conductor ha perdido su licencia de conducir mucho antes de lo que el esperaría, pues apenas ha durado 49 minutos con ella.

Según cuentan desde la BBC, los agentes de la autoridad de esta localidad le sorprendieron circulando a una velocidad mucho más elevada de lo permitido en esa zona. En concreto, el joven conductor fue ‘cazado’ a 95 km/h en un área limitado a 50 km/h, es decir, casi el doble de lo permitido. Quizás una de las razones sea el intento de impresionar a los cuatro amigos que iban dentro del coche cuando todo sucedió.

La policía alemana de Märkischer Kreis ha querido hacer un comentario al respecto de lo acontecido: “Algunas cosas duran para siempre, otras no duran ni una hora.”

El joven conductor, suspendido formalmente por un tiempo de cuatro semanas, se enfrenta una sanción económica de 200 euros, dos puntos en su licencia (una vez que se le permita conducir nuevamente), así como un periodo extendido de dos a cuatro años en el que será juzgado como un conductor novel.

No obstante, la propia policía ha comentado que únicamente recuperará su carné de conducir tras someterse a una “costosa reeducación”, algo que debería ser suficiente para disuadirle y reducir ese ímpetu mostrado al volante. Esperemos que haya aprendido la lección.

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Borja Díaz

Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta