Los agentes de policía foral de Navarra interceptaron este pasado domingo a un conductor polaco que pretendía cruzarse Europa con esta furgoneta, la misma con la que había sufrido un fuerte siniestro en los instantes previos a iniciar su viaje.
Según relataron los agentes, el conductor de la furgoneta les indicó que había tenido un accidente en Madrid pero que debía regresar a Polonia inmediatamente por lo que no se había parado a repararla.
Evidentemente, las explicaciones no convencieron a los policías que no dudaron en sancionarle con 500 euros de multa por infringir el código de circulación al no reunir su vehículo las condiciones técnicas necesarias.
Interceptado ya en la localidad navarra de Arre, lo más curioso de todo es que este hombre fuera capaz de recorrer casi 400 kilómetros por las carreteras de nuestro país con un vehículo completamente destrozado –396 kms para ser exactos– sin que nadie se percatara antes. Su objetivo, eso sí, era bastante más ambicioso pues se dirigía a Varsovia por una ruta de ¡casi 2.850 kilómetros! que ya seguía fielmente en el mapa. Demencial.
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