El fiscal de Aveyron (Francia) ha imputado a un grupo de diez jóvenes, acusados de informar a través de Facebook sobre la ubicación de los controles de velocidad en carretera. Al parecer, los detenidos habían creado un grupo en esta red social que se dedicaban a administrar y en el que sumaban ya más de 9.000 usuarios registrados, quienes se beneficiaban de una información completamente prohibida en Francia, la de la ubicación de los radares.

Al parecer, en primera instancia la fiscalía trato de cerrar la página en Facebook, algo que no pudieron llevar a cabo de modo que se vieron obligados a perseguir individualmente a los miembros del grupo, quienes han pasado ya a disposición judicial al tiempo que se ha abierto un debate en los medios de comunicación sobre el derecho de expresión en las redes sociales y la legislación vigente.

Lo cierto es que en Francia, están prohibidos tanto los avisadores como los detectores de radar o cualquier otro sistema como la red Coyote, que advierta sobre la posible ubicación de estos controles de velocidad. Sin embargo, estos jóvenes desafiaban con un simple smartphone y una cuenta en Facebook toda esta legislación y amparados en el derecho de expresión, avisaban en tiempo real al resto de usuarios quienes recibían esta información al instante.

Además, este espacio les permitía también expresar su opinión sobre estos controles y sobre los agentes que los realizaban, algo que tampoco ha pasado inadvertido para las autoridades que han acusado a alguno de los detenidos por insultar y difamar a los agentes públicamente.

Lettermark
Jose Carlos Luque

Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.