En el año 2016 fue el primero en contar en sus instalaciones con un reciben llegado Bentley Bentayga dispuesto a recibir unas modificaciones estéticas que le otorgasen una apariencia más deportiva y agresiva, además de una nueva línea de escape que aumentaba notablemente el sonido del W12. Ahora, Startech, ha vuelto a la carga y presenta un programa aún más extenso de personalización.
Como ya sucediera en la primera ocasión, el SUV británico recibe un completo kit de carrocería basado principalmente en la fibra de carbono. Destacan unos paragolpes modificados con nuevos elementos aerodinámicos y unos pasos de rueda ensanchados terminados en un tono oscuro. Así mismo, en la zaga toma protagonismo el difusor integrado en el paragolpes con unas luces LED centrales y con las salidas dobles de escape perfectamente integradas.
Pero una profunda modificación del aspecto exterior no podía tener cabida sin unas llantas de gran tamaño como estas de 23 pulgadas que encontramos en el Bentayga y que van montadas sobre neumáticos Continental con medidas 295/35 R23. El conjunto de nuevos elementos termina con unas luces LED situadas en el techo y un spoiler de fibra de carbono en la parte trasera.
En la parte mecánica también aparecen notables cambios y es que el propulsor W12 de 6.0 litros no se conforma con las ya de por si abundantes 600 caballos, sino que gracias a mejoras en la electrónica del motor consigue aumentar dicha potencia hasta los 700 caballos con un par máximo de 1.070 Nm, disponibles a tan sólo 1.350 revoluciones.
Si hablamos de precios, diremos que por ejemplo las modificaciones del motor cuestan 18.900 € o que la nueva zaga supone un gasto de 9.758 €. Hablamos de cifras altas pero que sin duda no supondrán un gran incremento en comparación al precio final del vehículo.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
