La semana pasada os contábamos como el propietario de tres BMW se las había ingeniado para evitar que sus preciados modelos alemanes se libraran de las terribles inundaciones provocadas por el huracán Harvey.
Sin embargo, no todos los vehículos existentes en Houston han tenido la misma suerte y algunos han quedado completamente inmersos en estas aguas, estando aún dentro de sus propios garajes.
Este ha sido el caso de un propietario que tenía la ‘suerte’ de juntar en su propiedad a dos Ferrari 458 Italia y sendos Mercedes, un CLA y nada menos que un Mercedes-AMG G 63.
El resultado como podéis ver en el vídeo que os dejamos a continuación, es una auténtica fatalidad. Quizás el G 63 se salve debido a su altura pero los Ferrari nos tememos que corran esa misma suerte.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
