Una mañana cualquiera –apostaríamos que de domingo–, estos conductores coincidieron en la carretera y lo hicieron para regalarnos un momento único: el accidente múltiple más ridículo de la historia. Efectivamente, ninguno de ellos era precisamente el crack de su autoescuela y se enfrentaban a una circunstancia digamos que, anómala. Nada del otro mundo, no nos engañemos…

Plena recta, visibilidad inmejorable y sí, un camión averiado obstruye la calzada, de un carril para cada sentido. ¿Qué dicta la lógica?, detenerse detrás del vehículo que obstaculiza la vía y rebasarlo cuando no venga nadie de frente, pensarás Correcto. Pero por si no te habías dado cuenta hasta ahora, esto es Rusia y nada más ‘aterrizar’ en el vehículo que graba la escena apreciamos algo extraño. Un Skoda Octavia blanco se halla detenido también el sentido contrario para dejar paso a los coches que siguen al camión.

Un conductor cortés, pensamos, pero no sabemos si es su presencia –algo con lo que no contaba la conductora con la que viajamos– o si ella sintió en el momento de adelantar al camión una gran atracción hacia el mismo, pero el caso es que no lo esquivó, precisamente. Y se dejó toda la parte lateral derecha de su coche que por suerte, no sale en plano.

Lo que sí vemos es al conductor del Octavia revisar el coche con cara de circunstancias. Al rato irrumpe en escena el que parece ser el copiloto, seguro que nunca vio un camión tan de cerca, pero está bien eso sí, su cara no es mejor que la del otro conductor y al fin la vemos a ella, chaqueta azul, gafas y mirada perdida al suelo. De repente, tras ella emerge una furgoneta amarilla por lo que viene siendo el campo. Comienza el baile. Tras el Skoda, un Toyota Auris ha comenzado a maniobrar para dar la vuelta pero no le da el giro y la vía está delimitada por unos bordillos de altura considerable. El Toyota se para, nuestro ‘amigo’ del Octavia no ha visto en ningún momento, algo que no le impide dar marcha atrás.

Segundo impacto. Y la cosa no acaba aquí. La furgoneta –todavía en el sembrado– ya no cabe por donde quería pasar pero adivina un nuevo hueco tras el Auris y acelera en el momento justo en el que la conductora del mismo se baja para recriminarle el golpe anterior al vehículo precedente y lo hace… ¡sin poner el freno de mano! Nuevo golpe y por suerte el vídeo se detiene. Se detiene justo cuando un imponente 4x4 irrumpe en escena con pinta de ir a aplastar a semejante melé de coches y erráticos conductores. ¿Lo haría?, ¿imaginas un final mejor para la historia?

facebookView full post on Facebook

Lettermark
Jose Carlos Luque

Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.