El Icona Vulcano se apunta otra vez a Pebble Beach dos años después de su estreno en el afamado Concurso de Elegancia precedido por su presentación en el Salón de Shanghái de 2013. El deportivo híbrido diseñado por el exdiseñador de Jaguar y Nissan Samuel Chuffart se concibió para acaparar miradas y en 2015 regresará con una característica que sin duda le dará notoriedad.
Su aparición en la cita californiana, que tendrá lugar la semana que viene, estará marcada por su carrocería de titanio descubierto. Las voluptuosas formas del Vulcano únicamente las definirá este material, conformando una auténtica escultura automovilística para la que se han necesitado miles de horas de trabajo manual. Icona ha publicado las primeras fotografías de su retoño en su perfil oficial de Facebook.
Los cinceles que la han labrado pertencen al carrocero italiano Cecomp -acrónimo que corresponde a Centro Esperienze Costruzione Modelli e Prototipi-. Fundada en 1978, esta empresa está especializada en modelos especiales, prototipos, vehículos de competición y eléctricos entre los que figuran el Alfa Romeo Canguro o el Lancia Delta S4.
Bajo su sólida coraza, que no varía los 1.595 kg que ya marcaba antes en la báscula, el Vulcano Titanium esconde una nueva propuesta mecánica, diferente a la de 2013. Icona lo ha dotado de una variante mejorada del V8 de 6,2 litros que impulsaba al Chevrolet Corvette C6 ZR1, que en el italiano genera 670 CV y 840 Nm de par máximo. Si el cliente lo desea, la marca turinesa ofrece aumentar la potencia hasta los 1.000 CV.
El propulsor se une a un cambio secuencial de Automac Modena con levas en el volante. Partiendo de esta configuración, el Volcano Titanium acelera de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos y alcanza los 354 km/h de velocidad máxima, valores tan solo ligeramente mayores que los de su anterior versión híbrida de 950 CV.
En este vídeo, Icona nos enseña cómo el equipo de Cecomp ha construido la capa de titanio del Vulcano:
