Si eres de los que pensaba que a Jeremy Clarkson le iba a venir bien su despido de la BBC por mala conducta para que se le bajaran los humos, estabas equivocado. El ex presentador de Top Gear aprovecha cada ocasión que tiene para crear una nueva polémica y en la última nos ha cogido a los españoles por medio.
Clarkson se decidió a escribir en el dominical 'The Sunday Times' una prueba del Seat León, la primera que le hacía a un coche de la firma española porque según sus propias palabras, en sus 31 años de profesión jamás había tenido la "tentación" de hacerlo. Eso sí, agradecía a la compañía la oportunidad porque así había podido "comprobar que era una pérdida de tiempo". "¿Quién en la Tierra puede comprar esta cosa?", se pregunta Clarkson sobre el coche más vendido en nuestro país el pasado año y un fijo en el top 10 de la última década.
Sin embargo, en el artículo se echan en falta criterios objetivos para definir al compacto. En su lugar, nos encontramos con los habituales tópicos sobre los españoles, "una panda que hace una semana se estaban disparando unos contra otros y apuñalando vacas", sostiene Clarkson.
La única ventaja que apunta sobre el Seat León es el precio, pero dice que si se atiende a ese criterio siempre se quedaría con un Skoda Octavia. "¿Quién puede querer un coche hecho por españoles, que son buenos pescando en Cornualles, cuando puede tener uno exactamente igual hecho por alemanes o checos?", se cuestiona a pesar de que España es el octavo productor de vehículos del mundo, el segundo en Europa tras Alemania con una producción de 45 modelos diferentes que en el primer trimestre de este año aumentó un 23,9%. Empezamos a sospechar que no sólo ha perdido el sentido del humor, también está empezando a perder la cabeza.
Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.
