El precio de gasolina sube con rapidez cuando los impuestos sobre los hidrocarburos ascienden pero tarda en bajar cuando éstos se reducen. Así lo estima la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) quien señala además que, a la vista de los últimos cambios fiscales, la bajada del precio de los carburantes se está retrasando demasiado.

La CNMC denuncia estas "asimetrías" en la evolución de los precios del gasoil y la gasolina, que se conocen coloquialmente como el "fenómeno de cohetes y de plumas", en referencia a la diferente velocidad de las subidas y de las bajadas, respectivamente.

Esta es la principal conclusión que saca el organismo en un informe que ha evaluado los últimos cambios fiscales de algunas CCAA, producidos entre diciembre de 2013 y enero de 2014. Por ejemplo, indica, en enero Navarra eliminó el tramo autonómico del impuesto, Cantabria lo redujo a la mitad, Madrid optó por devolver esa cuantía a los transportistas profesionales, mientras que Galicia lo subió al máximo. Sin embargo, "sólo en los casos de subida de impuestos a los consumidores, el encarecimiento de los combustibles se ha producido con celeridad", asegura el organismo.

En España solo las comunidades de Aragón, Navarra, País Vasco y La Rioja no tienen tramo autonómico de este impuesto.

Por otro lado, en enero pasado los precios máximos del gasóleo A y de la gasolina 95 (1,420 euros por litro en ambos casos) se registraron en Año Nuevo. A partir de ese día cayeron para experimentar un ligero repunte el día de Reyes y en las semanas siguientes iniciaron una tendencia descendente hasta el fin de semana del 21 al 23 de enero.

Lettermark
Jose Carlos Luque

Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.