Mansory vuelve a sorprender con una preparación al más alto nivel que incluye importantes modificaciones. Entre las más significativas destacan cambios estéticos que afectan tanto al frontal, donde destacan unos nuevos faros de día, y unos espejos retrovisores fabricados en fibra de carbono, que incrementan la penetración aerodinámica. También incluye Mansory un nuevo kit para la carrocería, mucho más estilizado que el original, y también fabricado en fibra de carbono, lo que previsiblemente permite mejorar el peso del conjunto. Por último en la trasera destaca un alerón que mejora en tren posterior cuando se circula a alta velocidad.
El propulsor también ha recibido modificaciones tanto en la gestión electrónica como en el sistema de escape y otros componentes internos con el fin de elevar la potencia de manera apreciable, desde los 602 caballos de serie hasta los 838. Igualmente, el par se ha incrementado hasta los 79,5 mkg. Con estas modificaciones, la velocidad máxima que se alcanza son 330 kilómetros/hora con una aceleración de 0 a 100 en 2,9 segundos. Para digerir este importante aumento de potencia se recurre a unas nuevas llantas de 20 pulgadas para el tren delantero y 21 para el trasero, con neumáticos de 245/30 y 325/25 respectivamente.
En cuanto al interior destaca la integración de nuevos materiales que buscan incrementar tanto la exclusividad como el confort. Para ello se utiliza piel de primera calidad que cubre el salpicadero y los asientos y un volante de nueva factura que se combina con otros componentes de aluminio, como por ejemplo los pedales. Por último, la fibra de carbono también está presente en el acabado del interior.
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