Las etapas de calor intenso que se dan en verano afectan a tu coche, pero no a todas las piezas de la misma forma. En concreto según el Barómetro de Averías del RACE lo que más sufre son los neumáticos y los motores.

En el caso de los primeros con altas temperaturas la posibilidad de un reventón se incrementa, sobre todo si los neumáticos no están en buen estado. También los pinchazos. Según el RACE en un porcentaje que incluso puede llegar al 30% en el primer cado y al 19% en el segundo.

Mantenimiento adecuado del coche en verano

En cuanto a los problemas relacionados con el motor, una incidencia habitual es el encendido del testigo de avería (28,3%) y un sobrecalentamiento del motor (46,5%).

Ante esta situación, desde el RACE señalan que un mantenimiento adecuado es clave para evitar este tipo de incidencias y nos recuerdan la importancia de revisar aspectos básicos del como como los neumáticos, batería, líquidos, luces, frenos y suspensiones.

Revisión de los neumáticos

  • Comprobar su presión, también la de la rueda de repuesto.
  • El dibujo debe tener una profundidad mínima de 1,6 mm según fija la normativa, aunque es recomendable cambiarlos cuando está por debajo de los 3.
  • Revisar que no hay grietas (algo típico cuando tienen ya varios años), ni zonas deformadas.
  • Si presentan un desgaste no uniforme puede ser debido a que los amortiguadores están en mal estado o el sistema de frenos no funciona como debiera.

Comprobación de la batería

  • Hay que fijarse en que los bornes estén bien fijados, que no hay fugas de líquido y que éste, en caso de ser una batería con mantenimiento (algo poco común), está al nivel necesario.

Nivel de líquidos

  • Todos deberán estar entre el máximo y el mínimo. Son el aceite del motor, refrigerante, frenos y dirección asistida y limpiaparabrisas.

Funcionamiento de las luces

  • Todas deben de funcionar de forma correcta, estar alineadas (algo que comprueban en la ITV) y los faros tienen que estar limpios, también por dentro. En caso contrario puede ser necesario un pulido.
  • No olvidarse de regular la altura en función de la carga para no deslumbrar a otros conductores. La mayoría de los coches incluyen una rueda que desde dentro del coche permite ajustarlos.

Frenos y suspensiones

  • Hoy día los coches cuentan en la instrumentación con un testigo que avisa del desgaste excesivo de las pastillas de freno o de alguna anomía como líquido de frenos por debajo del nivel correcto. Pero también el tacto del pedal nos puede dar alguna pista en este sentido.

Lo cierto es que con calor extremo se debe ser más puntilloso en algunos componentes como ya hemos visto. También hay otros que sufren con las altas temperaturas del verano, como la carrocería, dado que hay agentes externos que la dañan y que son más activos en verano ante la ausencia de lluvias durante días. Y si se producen precipitaciones muchas veces "llueve barro".

Otras recomendaciones para el coche en verano

Desde Alvato Luxury Detailing, especialistas en el lavado de vehículos y cuidado de la limpieza exterior e interior de vehículos avisan del peligro de algunos de estos agentes.

En climas secos la arena y el polvo son los más peligrosos porque los minúsculos gránulos de arena de playa o los que se desplazan en el aire se depositan sobre la pintura del coche. A esto se añade que la incidencia del sol directo sobre los materiales del interior acaba dañándolos.

Con el paso de los años, por ejemplo la parte alta más expuesta del salpicadero puede agrietarse o incrementar sus tolerancias por los cambios de temperatura y producir molestos ruidos en el coche al circular. Un parasol puede resultar muy útil en este sentido, pero también la hidratación de los componentes de piel con crema hidratante, por ejemplo de los asientos.

Con calor extremo se debe ser más puntilloso en algunos componentes.

Mención aparte merece el salitre del mar tan habitual en esta época del año. Los cercos que la sal marina deja en la ropa humedecida también los puede dejar en la pintura si se pasan muchos días junto al mar sin lavar el coche.

Por supuesto también en la tapicería de tela, donde el efecto de esto cercos es también habitual. Una limpieza interior con productos hidrófugos y preventivos son de mucha ayuda recomiendan desde Alvato.

Otro aspecto a tener en cuenta es la mayor presencia de insectos y, sobre todo, de excrementos de pájaro en la carrocería. Conviene eliminarlos cuanto antes porque los ácidos que producen son muy abrasivos sobre la pintura del vehículo y pueden dejar manchas perpetuas aunque se lave a las pocas horas. Hay que actuar rápido.

Si se opta por un túnel de lavado a presión se eliminarán algunos, pero no todos por eso es recomendable repasar a mano algunas zonas, pero sobre todo es básico secar la carrocería tras el lavado, aunque sea de forma manual. De hecho algunos productos químicos que quedan en las gotas actúan con el sol dejando rastros en la pintura.

Resulta recomendable optar por lavados preventivos con productos específicos que protegen del polvo, arena y sol durante muchos años. Es lo que se denomina detailing, un tipo de limpieza que se realiza con productos que además de limpiar protegen e hidratan. Son una buena opción.

Otra recomendación es encerar el coche con doble o triple capa en verano y evitar así estos problemas en la medida de lo posible, pero es importante aplicar la cera siempre a la sombra y después del secado.