Han sido unos meses convulsos dentro de Tesla, con su fundador Elon Musk en el punto de mira por distintas polémicas entre ellas la acusación de fraude que le ha forzado a abandonar la presidencia de la marca de coches eléctricos. Pero así y todo Tesla y el propio Musk pueden presumir este trimestre de haber cumplido una promesa: conseguir cerrarlo con beneficios. Algo realmente importante si tenemos en cuenta que la compañía californiana encadenaba dos años de pérdidas trimestrales.
En concreto el fabricante americano se anotó un beneficio de 254 millones de dólares tras este tercer trimestre, una realidad muy distinta a la vista hace justo un año cuando perdió 670 millones. Y hay que darle las gracias al Tesla Model 3 cuya producción ya está a pleno rendimiento (con 53.240 unidades fabricadas en este periodo de un total de 80.140 Teslas) y cuyas entregas ya están en marcha (para Europa habrá que esperar a 2019) elevando los ingresos un 130%.
Sin duda los datos son una buena noticia aunque según los analistas se preguntan cómo la empresa será capaz de mantener esta rentabilidad y es que a pesar de todo Tesla arrastra en este 2018 1.270 millones de dólares. Por el momento las acciones subieron un 12% tras presentar los resultados que muestran un un fujo de caja positivo de 880 millones y un 13% el día anterior cuando se anticipaban los buenos resultados.
Sea como sea, los nuevos datos son un pequeño colchón para una compañía que presentaba una caída cercana al 10% en los últimos 12 meses y cuyo valor bursatil ronda actualmente los 50.100 millones de dólares, según algunos analistas mucho menor al que podría llegar a tener de no ser por la conducta de Elon Musk.
Especializado en el mundo del motor, la competición y la tecnología, Antonio Ramos Ochoa es redactor de Car and Driver. Se comenta que antes de bajarse del carro ya iba diciendo el nombre de los coches que iba viendo por la calle. Unos cuantos años después sigue hablando de una de sus pasiones aquí. Aficionado al Motorsport, el cine, videojuegos y la historia, incluso se desfoga de vez en cuando al volante de un kart o un simulador.
