Este estadounidense de 32 años se llama Brett Sanders y se ha hecho famoso este fin de semana por pagar una multa de tráfico con dos cubos de monedas. Al parecer, nuestro protagonista fue pillado circulando a 63 km/h en una zona limitada a 48 km/h –30 mph–, una sanción que no alcanzaba los 80 dólares pero que él consideró injusta y no dudó en reclamar.

Para su sorpresa –que no para la nuestra– la justicia no le dio la razón de modo que Brett decidió vengarse de lo que consideraba un "robo" del "estado policial" que se está implantando en su país y se hizo con más de 20.000 monedas, la mayoría de un centavo y es que la sanción para entonces había ascendido ya a 212 dólares debido al aumento de las tasas. Ni corto ni perezoso, el joven se armó con dos cubos repletos de todas esas monedas y acudió a la oficina de tráfico cámara en mano para cubrir su deuda a su manera y por supuesto, inmortalizar el momento.

Como la venganza es un plato que se sirve frío, el conductor indignado se mostró tranquilo frente a la amable funcionaria que le atendió en el mostrador pero cuando ésta le indicó que realizara el pago no dudó en vaciar sus dos cubos de monedas delante de ella, obligándola a recoger y contar todas esas monedas, sin duda una labor tan compleja como tediosa. Al parecer, tras el recuento las autoridades concluyeron que había pagado 7,81 dólares más de lo indicado por lo que fue requerido para recoger su dinero, algo que Brett no quiso hacer. Aquí tienes el vídeo para que seas tú mismo el que pueda juzgar semejante acto de rebeldía.

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Jose Carlos Luque

Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.