Tras varios años de congelación y relativa tranquilidad dentro del componente de la potencia, el año 2014 fue el momento en que se abandonaban los antiguos V8 y se daba la bienvenida a los nuevos V6 turboalimentados, que daban una entrega de potencia superior a los 600CV acompañados del sistema de recuperación de energía ERS, que ofrecía 160CV. Los cambios no se quedaban solo en el nuevo uso de componentes, sino que se establecían nuevas reglas, entre las que destacaban un consumo máximo de 100kg por carrera, y una limitación en el flujo de combustible.

Más que un cambio, una auténtica revolución que obligó a los equipos a trabajar desde varios años antes y que estaba llamado a ser el cambio que abriera una nueva era dentro del mundo del motor. Y es que la Formula 1 centraba toda su atención en el mundo verde, ecológico, más adaptado a los intereses de los constructores y fabricantes de calle y mucho más respetuoso con el medio ambiente. O al menos, esa era la premisa con la que nació esta nueva Fórmula 1.

El director general de Renault, Cyril Abiteboul, no ha ocultado que el inicio fue complicado aunque, tras revisar los errores, las cosas mejoraron.

"Soportamos unos test de pretemporada y unas primeras carreras muy complicadas. Nadie podría esperar que tuviéramos un nivel tan alto de falta de competitividad después de los test de pretemporada. Revisamos nuestros objetivos y realizarnos una serie de ajustes para volver a ganar gradualmente la fiabilidad y rendimiento que esperábamos. Destacar un elemento como la fuente de nuestra mejora sería imposible, es el desarrollo de múltiples partes lo que ha resultado en una unidad de potencia mejorada que la que usamos para comenzar los test de pretemporada el pasado enero", ha comentado.

El amplio y continuo trabajo que desarrollaron sobre la temporada les permitió recuperar una distancia, que parecía insalvable al comienzo de la temporada, gracias mejoras continuas de las áreas modificables:

"Los componentes fueron modificados para hacerlos más robustos, el chasis tuvo que aprender a negociar el gran desafío que suponía la integración y la refrigeración, los avances del motor y la gestión de energía nos ofrecieron una mayor fiabilidad y eficiencia, y el fenómeno del "golpe" causada por la presión de los cilindros fue neutralizado gracias la ayuda de nuestro socio Total".

Con este camino recorrido, esperan con ilusión el futuro, y se marcan un objetivo claro, conseguir más victorias: "Obviamente tenemos una amplia lista de trabajo para la próxima temporada, pero también una dirección clara y una concentración, así como la determinación de conseguir más triunfos en 2015. Mercedes ha puesto el listón extremadamente alto, especialmente en términos de cómo su unidad de potencia y su chasis consiguen trabajar juntos, pero esperemos recuperar distancia y volver a luchar con ellos", ha concluido.