Doble reto para Alonso. El piloto español pasará las próximas dos semanas en Japón, primero compitiendo en la Fórmula 1, y acto seguido en el WEC, el mundial de resistencia, combinando los circuitos de Fuji y Suzuka.
Fernando se ha mostrado muy motivado, afirmando que le gusta tanto el circuito, como el país, y sobre todo, los aficionados. “Me encanta Suzuka, es una de las mejores pistas del año. Tengo muy buenos recuerdos de allí - 2006 fue un punto culminante a nivel personal – y me encanta pasar tiempo en Japón. Este año finalmente podré acostumbrarme a la zona horaria ya que estaré dos semanas, una en Suzuka y otra en Fuji. Estoy deseando de que llegue el momento y visitar también Tokio, donde intentaré pasar tantos días como sea posible entre las dos carreras.”
“Los aficionados de Suzuka son de lo más increíble. Incluso el jueves, que es cuando tenemos el día para la prensa y nos acercamos a la grada a firmar autógrafos. Están en el hotel, en la estación de tren, donde sea que vayamos, hay muchos aficionados apasionados.”
“Y no sería justo decir que son solo los aficionados lo que hacen que el circuito sea tan especial. Es genial porque es muy exigente y perfecto para los coches de Fórmula 1. Se puede utilizar todo el potencial de estos coches y su rendimiento aerodinámico, ya que combinan perfectamente con las curvas de Suzuka. El primer sector es una pasada, y cuando todo funciona bien y confías en el coche, puedes empujar al máximo en las ‘S’. Las fuerzas G y las emociones que sientes cuando corres allí son bastante sorprendentes.”, concluyó el piloto español, cuya única victoria en Suzuka data de 2006, con Renault, la cual prácticamente dejó sentenciado su segundo título de campeón del mundo.
