Ross Brawn no comprende las críticas al pasado Gran Premio de Mónaco. La carrera urbana fue, de lejos, la más aburrida de lo que va de temporada, con muy pocos adelantamientos y emoción durante toda la prueba. El director deportivo de la F1 considera “ingenuas” las críticas hace la cita del Principado, pues se trata de una carrera muy diferente a todas las demás que conforman el calendario.

Es un poco ingenuo esperar muchos duelos y adelantamientos en Mónaco. Es una carrera tan especial que no debe juzgarse con los mismo criterios que las demás. Naturalmente, la opinión de los pilotos siempre se tiene en cuenta”, afirma el británico.

El circuito de Montecarlo es el más estrecho de toda la temporada. Las calles del Principado son un marco único para una carrera de Fórmula 1, aunque este factor también limita alguna posible modificación en el trazado para favorecer los adelantamientos, pues gran parte de la prueba se celebra al margen del mar.

“En Mónaco necesitarías reclamar tierra del mar para hacer algo sobre el circuito, y eso evidentemente no depende de nosotros”, concluye Brawn.