Fernando Alonso nunca ha ocultado sus planes de intentar hacerse con la denominada ‘triple corona’ del automovilismo: lograr la victoria en el Gran Premio de Mónaco, las 500 Millas de Indianápolis y las 24 Horas de Le Mans. El asturiano cuenta con dos triunfos en la cita del Principado, conseguidos en 2006 y 2007, y participó en la Indy 500 esta temporada, aunque tuvo que retirarse por un fallo en el motor después de una brillante actuación como debutante en la disciplina.

El siguiente objetivo de Alonso es competir en Le Mans, pero primero correrá en las 24 Horas de Daytona como prueba preparatoria para la gran cita del mundo de la resistencia que tiene lugar en el trazado francés. El asturiano participará en la cita estadounidense a los mandos de un LMP2 de United Autosport, equipo propiedad de Zak Brown.

El CEO de McLaren explicó a Sky Sports cómo se gestó este proyecto. “Tuvimos algunas conversaciones cortas. Hablamos sobre carreras todo el tiempo. Estaba con Fernando y su manager Luis García Abad cuando dijo ‘Quiero correr en Daytona’. Me giré y le pregunté a Luis si iba en serio. Él me dijo que sí. Entonces, no tuve que preguntar dos veces. Hemos creado un monstruo, un monstruo de las carreras”, relató.

“Claramente tiene interés en Le Mans y quiere volver a Indianápolis. Estaba un poco sorprendido por lo convencido que estaba, pero la forma en la que Fernando trabaja es que piensa un poco y entonces toma una decisión. Está claro que ha pensado en ello más de lo que yo había anticipado. Cuando dijo que quería hacerlo, estaba muy convencido”, añadió Brown.