McLaren es, según Jenson Button, un conjunto bastante reacio al cambio, que no piensa en modificar su forma de trabajar porque ésta le ha dado buenos resultados. En su quinta temporada con esta escudería, el británico asegura que estar pasando por un mal año tiene que hacer reaccionar al equipo para que cambie de dirección y consiga, de esta manera, dejar de ser segundo en todo, que es lo que ha hecho durante los últimos años, y comenzar a ser primero en algo.

"Este equipo ha trabajado de forma muy similar durante muchos años. La escudería ha estado cerca de ganar el Campeonato durante muchos años, acabó segunda en el Mundial de Constructores, segunda en el de Pilotos, y cuando estás tan cerca, no cambias las cosas", explicó Button.

Como comenta el británico, conseguir resultados buenos, pero no los óptimos, es una situación que puede frenar un posible cambio que haga que un equipo dé el máximo. Esto es lo que precisamente, según el piloto de 34 años, necesita McLaren, pese al riesgo de que al modificar su método de trabajo las cosas vayan mal.

"No sientes que sea necesario cambiar las cosas. Seguir el mismo camino tantos años es un error, necesitas cambiar las cosas. Pero tienes miedo porque si lo haces todo podría ir mal", aseguró el británico.

En opinión del compañero de equipo de Kevin Magnussen, el hecho de que McLaren pase por un mal año puede hacerles, efectivamente, reaccionar y darse cuenta de que se puede cambiar algo con vistas a mejorar.

"Así que tener un año pasado malo podría ayudar al equipo a ganar un Campeonato. En el futuro, se podría mirar atrás y pensar que eso fue algo bueno para el equipo porque nos hizo darnos cuenta de que necesitábamos un cambio. Estuvimos tan cerca de ganar el Campeonato pero no lo hicimos porque no llevábamos la dirección correcta, necesitábamos algo nuevo. Los años malos pueden ser positivos para un equipo", señaló el de Frome.

En conclusión, el piloto de McLaren apunta que parte del problema de su equipo es que no ha sabido ser lo suficientemente crítico consigo mismo en el pasado y por eso, las perspectivas de mejora, sin una autoevaluación previa, son nulas y un aspecto que se debería modificar de cara al futuro.

"Ningún equipo es perfecto, tienes que darte cuenta de las debilidades. No voy a señalar a nadie porque todos tenemos algo, pero se trata de trabajar como un equipo y de mejorar como conjunto. Te tienes que dar cuenta pronto dónde se encuentran esas debilidades y trabajarlas. Eso es lo que vamos a hacer justo ahora", finalizó.