"Un buen viernes no garantiza estar en la Q3", decía Carlos Sainz tras los entrenamientos libres de ayer. Y a pesar de que el piloto español ha conseguido meterse en la última tanda de clasificación y conseguir salir mañana octavo en la parrilla de Albert Park, se mostró insatisfecho.

El piloto de Red Bull quería más y reseñaba en los micrófonos de Movistar+ F1 que habían "mejorado muy poco el tiempo de ayer, así que hay que ver y analizar qué ha pasado para que los demás mejoren tanto y nosotros no". Pero no todo es negativo, el madrileño resaltó el gran trabajo "en la Q3, sobre todo porque hemos tenido muchos problemas desde el principio de la clasificación, no encontrábamos el equilibrio ni el feeling del coche. Pero poco a poco hemos ido cogiendo confianza".

Sainz superó a Daniil Kvyat, su compañero de equipo en la Q3, rebajando su tiempo casi medio segundo, pero reconoce que "fue una vuelta difícil, porque cuando no tienes confianza con el coche cuesta mucho atacar. Así que hemos tenido que ir poco a poco, pero al final hemos puesto todo en su sitio, que es lo que contaba".

El hecho de que Ricciardo sufriera un accidente por un error de pilotaje le benefició para conseguir esa octava posición, con unos monoplazas nuevos que "cuesta mucho, son unos coches que también son muy sensibles al cambio de temperatura, al viento… A una vuelta hoy me he divertido, aunque no tenía del todo confianza".