Charles Leclerc desembarcó en formulas de promoción en la temporada 2014, tras años en el karting, siendo de los pilotos que llamaban la atención. Para debutar, el monegasco comenzó en uno de los pasos más usados por los pilotos, la Fórmula Renault 2.0.
Allì, Leclerc completó una fantástica temporada acabando subcampeón solo por detrás del dominador absoluto del año, Nyck de Vries, protegido de McLaren, que disputaba su tercera temporada doble en la Fórmula Renault. En 2015, Charles dio el paso hacia la Fórmula 3, con el difícil papel de tomar el relevo de Max Verstappen en el equipo Van Amersfoort.
Leclerc sorprendió y ya en su primer fin de semana consiguió una victoria y una segunda posición. El comienzo del año fue extremadamente bueno e incluso se especuló con un posible título, pero a medida que el año avanzó, Prema no dio opciones a sus rivales, doblegando con Felix Rosenqvist a la cabeza tanto a Antonio Giovinazzi como al propio Charles Leclerc.
Al monegasco le quedó el consuelo de ser el mejor rookie del año, por delante del ahora protegido de Mercedes George Russell y del actual piloto de Fórmula 1 Lance Stroll. De la Fórmula 3 y ya bajo el amparo de Ferrari, Leclerc dio el salto a la GP3 Series, junto al mejor equipo, ART GP. Charles no falló y en su primer año consiguió el título, dejando en evidencia a su compañero en la Ferrari Drivers Academy, Antonio Fuoco, y también, en cierta manera, cobrándose cierta venganza con Nyck de Vries, dándole la vuelta a lo ocurrido en Fórmula Renault 2.0, donde la experiencia del neerlandés tuvo mucho que decir.
El siguiente paso para Charles era la GP2 Series, reconvertida en FIA Fórmula 2. Ferrari le encontró acomodo, junto a Antonio Fuoco, en Prema Racing. Leclerc no necesitó periodo de adaptación y ya en la primera sesión de clasificación consiguió la pole position. Algo que el monegasco repetiría carrera tras carrera hasta la llegada de la séptima cita, en Hungría, cuando una infracción técnica se la arrebató. En carrera, logró victorias en Bahréin, Barcelona, Bakú, Austria, Silverstone… fue el piloto más rápido en Mónaco, si bien no pudo transformarlo en puntos.
Y a pesar de una mala cita en Monza, la Fórmula 2 llegó a Jerez donde Charles volvió a ser el dominador con la pole position y la victoria en la carrera principal, suficiente para lograr el título de campeón aun con tres carreras por delante, un escenario muy diferente a la lucha hasta la última carrera que en 2016 protagonizaron Pierre Gasly y Antonio Giovinazzi.
Leclerc ha hecho una extraordinaria temporada, y si bien ha tenido errores, no hay que olvidar que se trata de su primer año, y que si los rivales han cometido aún más fallos no nos dice otra cosa que el hecho de que es una categoría más complicada de lo que pueda parecer. Charles ha vencido, y casi humillado a su compañero en la Ferarri Drivers Academy, Antonio Fuoco, donde con una cita por delante, suma 249 puntos por los 98 del italiano. Ha vencido a los protegidos de Renault, Oliver Rowland y Ncholas Latifi. También a la esperanza rusa, Artem Markelov y a la esperanza italiana, Luca Ghiotto, sin olvidar al protegido de Honda, Nobuharu Matushita, y su viejo rival Nyck de Vries.
Ahora la pelota queda en el tejado de Ferrari, al que le urge encontrar sitio al actual campeón de la Fórmula 2, que por reglamento no podría repetir la categoría, como también se comprometió en cierta manera en encontrarle sitio a Antonio Giovinazzi, quien sustituciones de última hora al margen, ha estado ejerciendo de tercer piloto de la Scuderia.
Con Haas, supuesto segundo equipo de Ferrari, con sus pilotos confirmados, a Leclerc le queda conseguir una de las vacantes en el equipo Sauber, pues de lo contrario, difícilmente los aficionados entenderían que un campeón de GP3 y Fórmula 2 en su primer año, protegido de Ferrari, no acabe encontrando su lugar en el Gran Circo como piloto titular, dudando una vez más en el sistema y ridiculizando la valía de la Super Licencia.
