Un año más, Mónaco ha sido fiel en su cita con el calendario del mundo de Fórmula 1, y tal como dicta la tradición, la jornada que debería celebrarse en viernes, se pasa al jueves, añadiendo un valor diferenciador a un Gran Premio que ya es suficientemente especial por sí solo.
Red Bull comenzó dominando los primeros entrenamientos libres en uno de los circuitos señalados a fuego en su particular calendario, uno de los circuitos donde el chasis gana más protagonismo que el motor. Daniel Ricciardo fue el más rápido con un tiempo de 1’12’’126, superando a su compañero de equipo en décima y media.
Verstappen fue el más rápido durante buena parte de la sesión, pero hacia el final cometió un error en Santa Devota que le hizo irse largo. Aunque pudo regresar a pista, se metió inmediatamente a boxes y los mecánicos comenzaron a trabajar en sus frenos. Para colmo de males, a los comisarios no les gustó la forma con la que el de Red Bull ingresó a pista, engranando la marcha atrás, por lo que decidió abrir una investigación que podría acabar en sanción.
La tercera posición fue para Lewis Hamilton, que por momentos pareció que podía plantar cara a los Red Bull, antes de que éstos evidenciaran que todavía tenían más. El actual campeón marcó un 1’12’’480, mientras que en la cuarta posición, Sebastian Vettel ya se va al 1’13’’041, a casi un segundo de Daniel Ricciardo. Vettel fue 25 milésimas más rápido que Kimi Raikkonen, que se tuvo que conformar con la quinta posición.
El sexto lugar no fue para Valtteri Bottas, como cabría esperar, sino para Carlos Sainz, que con el Renault consiguió un fantástico tiempo de 1’13’’456, que lo pone en el ojo del huracán de cara a conseguir un gran resultado este fin de semana. Sainz fue más de dos décimas más rápido que Sergio Pérez, octavo, y cuatro que Romain Grosjean, noveno. El galo pasó buena parte de la sesión en boxes tras rozar uno de los muros al inicio de la sesión.
Completó el top10 Sergey Sirotkin, que como Grosjean, rozó el muro. Además uno poco habitual, el de recta de meta por su parte derecha. Como consecuencia, el ruso dañó la parte delantera y pinchó el neumático trasero. Pero en Williams hicieron un fantástico trabajo reparando el coche y apenas tuvo incidencia en el programa de Sirotkin, que consigue su mejor resultado del año.
Gran trabajo también de los Toro Rosso, especialmente por parte de Brendon Hartley, que fue el que más rodó con 46 vueltas, logrando por momentos tiempos muy competitivos pero conformándose con la duodécima posición final, con un registro de 1’14’’034.
Menos plácida fue la sesión para Fernando Alonso. En las vueltas de instalación iniciales, el asturiano reportó problemas con los frenos. Desafortunadamente, McLaren tuvo que desmontar gran parte del vehículo en búsqueda de estos inconvenientes, encontrándolos en el sistema ‘brake-by-wire’ que tantos quebraderos de cabeza dio en 2014. El equipo reparó el vehículo pero le llevó gran parte de la sesión.
Fernando Alonso regresó con apenas 15 minutos para el final de la sesión, y aunque logró completar finalmente 16 vueltas, su tiempo no pudo bajar del 1’14’’637, quedando en la decimoséptima posición. Aun así, puede estar más contento que Magnussen, cuyos problemas no pudieron ser resueltos y acabó la sesión con solo siete vueltas y el peor tiempo, 1’18’’801. Una sesión, que por otra parte, se resolvió sin accidentes y sin aparición de banderas rojas.
