La decisión de Daniel Ricciardo de cambiar Red Bull por Renault es una de las apuestas más arriesgadas. El piloto australiano se embarca en un camino que sabe que no será fácil, pero a veces es necesario un cambio.

El todavía piloto de Red Bull admite sentir miedo por el salto que va a dar y espera poder conseguir buenos resultados, aunque no puede saber que le deparará el futuro ni cuál será el rendimiento del Renault el próximo año.

“Necesitaba escuchar a mi corazón, necesitaba irme y tomar mi propia decisión. El cambio da miedo, estoy jodidamente aterrado. Y ahora sé que el próximo camino de mi vida no va a ser fácil, pero tengo que dar este paso e intentar sacar la mejor versión de mí mismo. Así es como es. Es el siguiente paso, un salto, un nuevo reto. Me voy a Renault el próximo año y voy a abrir mi mente e ir a todo corazón. Nadie tiene una bola de cristal o puede predecir los resultados de mi decisión, pero, no obstante, la decisión está tomada”, explicó el de Perth en The Player’s Tribune.

El final de temporada de Ricciardo está siendo complicado, acumulando un gran número de abandonos por fallos en su monoplaza, pero eso no significa que, en el momento en el que se quite el mono de Red Bull por última vez no vaya a ser emotivo.

“Por ahora, quiero terminar el año fuerte. No va a ser fácil mentalmente, eso lo sé. Cada vuelta que de significará una vuelta menos en Red Bull. Y, cuando llegue al final de Abu Dhabi, creo que voy a tener una buena llorera. Tal vez varias. Luego llegará el invierno, me reuniré con mis nuevos amigos de Renault y empezaré de nuevo”, concluyó Ricciardo.