Red Bull vivió una auténtica pesadilla en el Gran Premio de Azerbaiyán. Sus pilotos tuvieron varios roces durante la carrera y finalmente ocurrió lo que muchos aficionados veían venir: Max Verstappen y Daniel Ricciardo chocaron entre ellos en la frenada de la primera curva, terminando así con las carreras de ambos y dejando a Red Bull sin puntos en el circuito de Bakú. Una situación que los equipos desean evitar a toda costa: ver a sus dos pilotos fuera de carrera.

A pesar de que es fácil señalar a alguno de los dos como el culpable de la acción, ninguno de los dos ha querido culpar al otro de lo sucedido una vez se bajaron del coche. “Ha sido algo muy malo para el equipo. Eso ha sido lo peor de todo, no importa de quién haya sido la culpa. Había mucha gente trabajando en el coche para tenerlo en carrera y un choque entre compañeros no es lo que quieres”, comentó Verstappen.

“Es fácil decir que esto iba a ocurrir después. Estábamos yendo al límite y el accidente ha ocurrido, pero hemos demostrado que podíamos luchar cuerpo a cuerpo y ahora como equipo vamos a hablar sobre ello. Nos tocamos antes rueda con rueda, pero podía haber sido cualquiera. No creo que eso fuera un problema. No importa, como equipo es algo muy malo, no debería haber ocurrido. Vamos a hablar con el equipo y a ver qué sucede”, añadió el neerlandés.

Ricciardo comparte la visión de Verstappen al lamentar lo ocurrido tras el esfuerzo realizado por Red Bull. “Solo quiero pedir perdón al equipo. He visto varias repeticiones y tengo que ver un par más. La prioridad ahora es disculparse con el equipo antes que señalar con el dedo. En ese punto ciego es difícil ver. Nos hemos tocado ya acabó con la peor situación posible. No es positivo”, declaró el australiano.

“Ahora que ha ocurrido, es fácil decir que iba a pasar. Estábamos luchando al máximo. Nos hemos tocado y yo he hecho mi maniobra. He perdido ahí y nos puso en una situación muy desafortunada. El incidente ha sido un momento duro de digerir”, afirmó Ricciardo.

La decisión de Red Bull de dejar luchar libremente a sus pilotos a pesar de los roces que estaban teniendo ha recibido muchas críticas, pero no parece que la estructura austriaca vaya a cambiar su postura. “Va en contra de nuestra filosofía. Dejamos que nuestros pilotos compitan. No tenemos un número uno y un número dos, pero esperamos responsabilidad por su parte”, explicó Helmut Marko.