El sonido de los nuevos motores V6 Turbo ha dejado de ser una mera anécdota de la nueva era en la Fórmula 1 y se ha convertido en un problema y un inconveniente. Al menos eso cree el director ejecutivo de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone, quien está dispuesto a impulsar un cambio:

"Lo que he dicho es que tenemos que ver si hay alguna manera de hacer que suenen como los coches de carreras. Yo no sé si es posible, pero debemos investigar", dijo el británico al diario Telegraph.

Además, Ecclestone desea tomar medidas cuanto antes, ya que se niega a esperar a que la Fórmula 1 sea perjudicada como espectáculo.

"Creo que vamos a llegar a las primeras carreras fuera del camino y luego tal vez se busque hacer algo. No podemos esperar toda la temporada. Podría ser demasiado tarde", dijo Ecclestone.

Ecclestone fue uno de los primeros en criticar la nueva era del motor V6 incluso antes de que se encendieran las nuevas unidades de potencia. Pero ahora no sólo se suman las críticas del británico, sino que han llegado otras nuevas, como por ejemplo las de los promotores del pasado Gran Premio de Australia, quienes han llegado a decir que el bajo volumen de los motores podrían ser un incumplimiento de contrato.

"No es por lo que pagamos. Esto va a cambiar" dijo el jefe del Gran Premio de Australia, Ron Walker, al periódico Age de Melbourne.

Y finalizó afirmando que ya se había puesto en contacto con Ecclestone para cambiar las cosas, quien a su vez, mantenía conversaciones con el Presidente de la FIA (Federación Internacional de Automovilismo), Jean Todt.