Los problemas financieros acompañan a la Fórmula 1 desde hace meses y los equipos de la parte media y baja de la parrilla no logran conseguir todo el capital necesario para poder desarrollar monoplazas competitivos. Ésta se está convirtiendo en la dinámica de la competición y no parece que vaya a darse un cambio a corto plazo. Uno de los equipos que más comentarios ha levantado a lo largo de la pasada temporada respecto a sus problemas económicos ha sido Lotus.

Para el propietario de la escudería de Enstone, Gerard López, estos problemas han dejado de ser algo exclusivo y han pasado a ser la tónica habitual de la mayoría de las formaciones:“Para el 80 por ciento de los equipos, su situación financiera no es mejor que la nuestra. Si la mitad de esos equipos dijeran que van a dejar la Fórmula 1, llevaría al colapso del campeonato”, afirmaba el luxemburgués a la página web rusa f1news.ru.

Tras una temporada de escasez económica, Lotus finalmente logró prosperar con un monoplaza competitivo, pero siendo objeto de rumores que afirmaban que la escudería estaba luchando por pagar a sus pilotos, empleados y proveedores.

Según López, en la actualidad es extraordinariamente difícil para un equipo recaudar dinero a través de inversiones o del patrocinio tradicional.“Puedo ir a los inversores potenciales y decirles ‘quiero vender millones de coches que funcionen con energía renovable y tecnología híbrida’ y me dirán '¡uau, vamos a ver lo que podemos hacer!’. Pero si digo que quiero el dinero para la Fórmula 1, para participar en uno de los mayores eventos deportivos del mundo, no se consigue la misma respuesta”, finalizaba.