Pese a que Pascal Wehrlein ha demostrado hasta ahora un nivel superior al de su compañero Marcus Ericsson, lo cierto es que su futuro podría estar lejos de la Fórmula 1 a partir de 2018.

Según adelanta el diario alemán Bild, el alemán perderá su asiento de cara a la próxima temporada, pues el propietario de Sauber guarda una estrecha relación con Ericsson que le podría servir de aval para continuar al volante de uno de los monoplazas suizos.

Además, pilotos como Antonio Giovinazzi o Charles Leclerc están en la órbita de Sauber para el próximo curso, especialmente desde el acuerdo multianual de suministro de motores Ferrari cerrado durante el pasado fin de semana en Hungría

"He puntuado los cinco puntos y en clasificación ganó 8:2 contra Ericsson. ¿Qué más puedo hacer?", explica un contrariado Wehrlein a Bild.

Así, Bild y el Blick austriaco apuntan a que el alemán podría regresar al DTM, donde ganó el campeonato en 2015, o emprender una nueva aventura en la Fórmula E.