Años atrás, el tema del mapa de motor ocupó fines de semana completos durante numerosos Grandes Premios. Santo Grial de los escapes sopladores, Red Bull y Renault encontraron una gran ventaja competitiva que, tras unas carreras prudenciales, la FIA se decidió a atacar. Lo hizo como la FIA suele hacer las cosas, de forma que resulta complicado comprender, prohibiendo y desprohibiendo el mismo fin de semana, limitando, pero permitiendo hasta final de temporada, etc etc.

De aquellos complicados años quedan vestigios hasta nuestros días, como bien ha podido comprobar Max Verstappen durante el pasado Gran Premio de Mónaco, que ha tenido que sufrir las consecuencias de la presente necesidad de legislar hasta lo absurdo.

Formula one, Race car, Formula libre, Race track, Formula one car, Vehicle, Motorsport, Open-wheel car, Formula one tyres, Formula racing, pinterest

La normativa se volvió restrictiva con el tema de los mapas de motor, con dos salvedades, la salida, y las paradas en boxes, donde se permite a los equipos poner un mapa de motor distinto al de carrera. Para evitar que un equipo pueda sacar ventaja de variar entre distintos mapas de motor, la centralita bloquea el mapa tras realizar la salida o al salir de boxes.

Y precisamente en boxes fue donde Max Verstappen cometió el error. En plena lucha por ganar posición con Valtteri Bottas en el pit lane más estrecho del año, el piloto centró todos los esfuerzos en intentar no volver a chocar con Bottas, aunque el daño ya estaba hecho, e ir lo más pegado posible a la línea, al tiempo que se focalizó en apagar el limitador lo antes posible para evitar que Bottas le ganara espacio a la salida de boxes.

Race car, Formula libre, Formula one, Formula one car, Formula one tyres, Vehicle, Formula racing, Open-wheel car, Motorsport, Car, pinterest

Durante este periodo de máxima tensión, el piloto neerlandés olvidó hacer un sencillo procedimiento, el de, una vez encarrilan la salida de boxes, volver al modo carrera. Una vez abandonó el carril de boxes y se incorporó a pista, el mapa motor queda bloqueado y el reglamento impide cualquier tipo de cambio, por lo que el neerlandés se vio obligado a finalizar la carrera en estas condiciones.

Dicho mapa de motor ofrece una entrega de potencia más dulce en bajas revoluciones, lo que irónicamente en Mónaco no es el mayor problema del mundo, aunque sí es contraproducente cuando estás intentando realizar un adelantamiento, pues tal y como se observó, Hamilton se despegaba del Red Bull en cada pequeña recta. Sin duda, el problema habría sido mucho mayor en cualquier otro trazado, por lo que al final, el piloto incluso puede sentirse afortunado.