La historia de superación de Robert Kubica tendrá su culminación con su regreso a la parrilla de la Fórmula 1 la próxima temporada. El polaco será piloto titular de Williams tras pasar un año en las filas del equipo de Grove como reserva, donde ha podido familiarizarse con la estructura antes de dar el salto a la alineación titular como compañero de George Russell en 2019.

Aunque se quedó sin un asiento este año, Kubica aceptó quedarse en el banquillo de Williams para ayudar en labores de desarrollo en la escudería británica. El polaco pudo subirse al monoplaza en entrenamientos libres y durante jornadas de test, lo que sirvió a Williams para evaluar si era capaz de pilotar un Fórmula 1 a pesar de las graves secuelas de su accidente en 2011.

El rol de reserva de Kubica terminó siendo clave a la hora de ofrecerle un asiento titular para la próxima temporada. “Una de las cosas que más me impresiona de Robert es el hecho de que no le dimos el asiento titular este año, pero aun así accedió a ser reserva y creo que eso dice mucho de su personalidad, declaró Claire Williams.

“Este año ha trabajado con el equipo y eso le ha dado una experiencia incalculable para dar el salto a piloto titular para la temporada que viene. Conoce a todo el mundo en el equipo y se lleva bien con ellos. Es aplicado y pasa mucho tiempo en la fábrica para ayudarnos con nuestro rendimiento. Ahora, está absolutamente preparado. Llevamos a cabo un proceso de evaluación y él acabó al frente”, añadió.

Williams reconoce que el trabajo de Kubica fue fundamental a la hora de encontrar los problemas del monoplaza de esta campaña. “Tiene un conocimiento extraordinario de ingeniería y trabaja muy duro. Ayuda a los ingenieros en lo que están haciendo y me presiona. Me llama a las dos de la mañana en los aeropuertos alrededor del mundo para contarme lo que ha salido mal y lo que necesitamos hacer”, explicó.