Sebastian Vettel se ha alzado con la victoria en el primer Gran Premio de la temporada celebrado en Australia. El piloto de Ferrari completó una carrera perfecta y ganó su particular duelo a Lewis Hamilton para arrancar el mundial con líder de la clasificación.

Sin embargo, la carrera estuvo marcada por el Virtual Safety Car que el director de carrera, Charlie Whiting, se vio obligado a desplegar en el ecuador de la prueba después de que Romain Grosjean tuviese que detener su monoplaza, lo que acabó con las esperanzas del equipo americano para lograr su mejor resultado en Fórmula 1.

Con el VSC, Vettel aprovechó para realizar su parada y, así, recuperar los siete segundos que le separaba de Lewis Hamilton. Una vez el piloto de Ferrari salió de boxes, ya estaba por delante de su principal rival al encarar la curva uno del trazado. Desde ahí, Vettel aguantó sin inmutarse para cruzar la bandera a cuadros en primera posición.

La victoria de Vettel ha sido una sorpresa. Tras el despliegue de potencial por parte de Hamilton la jornada del sábado, parecía que en Australia estaría a otro nivel. Sin embargo, el ritmo de carrera no fue tan desigualado, suficiente para que el cuatro veces campeón del mundo aprovechase su oportunidad estratégica para ganarle la partida a Hamilton y Mercedes.