Haas ha decidido seguir adelante con la apelación de la descalificación de Romain Grosjean en el Gran Premio de Italia. El equipo estadounidense ha iniciado el proceso de apelación con la esperanza de recuperar la sexta posición en la que el piloto francés finalizó la carrera en Monza, antes de ser excluido por la irregularidad del fondo plano de su monoplaza.

La protesta sobre la ilegalidad del suelo del vehículo de Grosjean vino por parte de Renault horas después de terminar la carrera en Monza. La FIA determinó que el fondo plano, estrenado en Canadá, no cumplía con la nueva interpretación de la normativa técnica que se publicó en julio, con el añadido de que Haas recibió previamente un aviso sobre la ilegalidad de la estructura del suelo. La escuadra se defendió alegando que no tuvo el tiempo suficiente para realizar modificaciones en la pieza debido al parón veraniego.

Haas contaba con 96 horas para realizar una apelación oficial desde el momento de la descalificación. Si bien los equipos suelen optar por no apelar, la estructura estadounidense ha preferido continuar con el proceso para tratar de recuperar unos puntos que pueden ser importantes en la lucha por la cuarta posición del mundial de constructores, pues justamente Haas había adelantado a Renault con la sexta plaza de Grosjean.

Después de confirmarse la exclusión de Grosjean, Gunther Steiner dio a conocer su intención de apelar la descalificación. “No estamos de acuerdo con la decisión de los comisarios de penalizar a nuestro equipo y pensamos que nuestra sexta posición en el Gran Premio de Italia debería de mantenerse. Vamos a apelar la decisión de los comisarios”, comunicó el jefe de equipo de Haas.