Lewis Hamilton se lleva una victoria caída del cielo en el Gran Premio de Bahréin. El piloto británico lo dio todo en la pista para maximizar el potencial del Mercedes. Primero, apretando durante toda la prueba hasta alcanzar a Sebastian Vettel, que en ese momento rodaba segundo.

Una vez se enzarzaron en la lucha, el británico lo intentó una primera vez, aunque Vettel salió airoso. No sucedería lo mismo en la segunda ofensiva. El pentacampeón pasó a su rival con una magnífica maniobra y Vettel trompeó al meter gas demasiado pronto. El alemán destrozaría poco después su alerón delantero a causa de las vibraciones.

Desde ahí, Hamilton solo tenía a Leclerc por delante. El monegasco, con problemas de motor, no pudo hacer nada por evitar la brutal adelantada del inglés. A solo ocho vueltas para el final, Hamilton se ponía líder y cabalgó sin problemas hacia la bandera a cuadros para lograr su primer triunfo de la temporada.

"Hoy fue un trabajo realmente duro y el equipo fue increíble. Fue una carrera devastadora para Charles. Hemos tenido suerte”, reconoce. “Lo di todo en la carrera. Este chico [Leclerc] tiene muchas victorias de cara al futuro", concluye.