La paciencia se agota por momentos en Jenson Button y Fernando Alonso pues, aún conscientes de que el proyecto de McLaren-Honda necesita tiempo como bien han defendido hasta el momento, el poco avance que se ha visto a lo largo del año empieza a ser frustrante.

El objetivo inicial que se marcaron en pretemporada era el de estar en zona de puntos de manera continua mediada la temporada y lograr podios a final de año, algo que el propio piloto inglés ya se encargó de revisar a la vuelta de las vacaciones de verano.

Tras dos carreras muy complicadas para el equipo como las de Spa-Francorchamps y Monza, el hombre que está en el punto de mira es Yasuhisa Arai, responsable de Honda, al no ofrecer soluciones que den frutos en pista.

Sin embargo, el japonés ha arrojado algo de luz de cara al futuro cercano, pues afirma que ya han localizado su punto débil y trabajan con gran dedicación en solventarlo para la próxima temporada.

"Ya hemos descubierto que nuestro punto débil está en la unidad de potencia y ya hemos empezado el programa para la próxima temporada", ha dicho a F1i sin especificar qué parte es la que falla.

"Hacemos todo lo posible como un equipo, así que sabemos dónde hay un punto débil en la unidad de potencia, y también McLaren está haciendo todo lo posible para hacer un buen coche".

Así, deja claro que ya trabajan en 2016 sin olvidarse de progresar este año con los tokens que les restan por usar, algo que será vital para tener la mejor base posible de cara al próximo curso.

"No puedo decir nada sobre el futuro de los 'tokens' de esta temporada, pero nuestro punto débil está en desarrollo, algo que los pilotos ya sabían. Es muy difícil. Por supuesto, queremos cambiar para el próximo año, pero queremos conseguir un número pequeño de ganancias en el desarrollo de cada carrera", ha concluido.